El Ayuntamiento de Torrevieja encarga la tasación de las instalaciones de la empresa de basuras
Nueve años después de que venciera el anterior contrato con Acciona, el equipo de gobierno continúa sin liquidar todos los bienes
Ardua, costosa y lenta. Así se está planteando la tarea para liquidar todos los bienes que debieron revertir a propiedad municipal cuando, en 2016, venció la anterior contrata de basuras. Tanto entonces como ahora, con el nuevo servicio adjudicado en 2022 a Acciona, el Consistorio y la multinacional continúan con esos deberes pendientes que no ejecutó ni el pentapartito (2015-2019) ni el actual equipo de gobierno del PP durante la pasada legislatura.
La Junta de Gobierno daba esta semana un nuevo paso con el encargo de un nuevo contrato. El mismo, según explico el concejal-secretario, Federico Alarcón, tiene por fin la valoración de varios bienes. La empresa adjudicataria, presente en el Acuerdo Marco, es Técnicos en Tasación, que ya ha ejecutado multitud de contratos recientemente como los de valoración del precio de la actual estación de autobuses o la de un solar en San Luis que el Consistorio quiere transformar en zona verde.
En este caso, el objeto de la tasación, según explica la edil de Aseo Urbano, María José Ruiz, son las instalaciones. En concreto, Acciona explotaba con la anterior contrata una nave, la que hace de base de operaciones en Ronda Ricardo Lafuente hasta que se construya una nueva nave. También una oficina y retén ubicado en la calle Patricio Pérez, y un segundo retén emplazado en calle Noruega.
La edil manifiesta que este es otro de los pasos necesarios para acabar con esa liquidación. Una que, explica, ya empezó con la tasación de la maquinaria, entre ellos los camiones. «Muchos ya habían sido dados de baja en Tráfico», asegura Ruiz, que incide que ya están valorados todos aquellos heredados que todavía están en activo. En total, unos 37 vehículos.
Actualmente, algunos de esos vehículos antiguos que vienen de la anterior contrata siguen haciendo ruta para hacer la recogida de los contenedores que quedan todavía de carga trasera. Por contra, los camiones más modernos se reservan para los nuevos contenedores de carga lateral.
En el último año, el PSOE se ha mostrado especialmente crítico con esa situación y ha evidenciado que esos vehículos presentan un mal estado y deberían ya haber sido retirados. Algo que, entiende la portavoz socialista, Bárbara Soler, es un «trato de favor» a la empresa.