El modelo agrario pone en peligro al escarabajo pelotero del Mediterráneo

Estos famosos seres, de los que el informe del UICN evalúa 200 especies con presencia en la región mediterránea, contribuyen con su presencia a airear los suelos y reducir las emisiones de dióxido de carbono y de metano, además de conformar un foco de nutrientes para el ecosistema. Sin embargo, su supervivencia no está garantizada a causa en gran medida del actual modelo agropecuario. En concreto, hasta un 20% de estas especies podrían estar en peligro de extinción por la degradación del medio ambiente. El abandono de la agricultura extensiva y el sobrepastoreo se encuentra entre sus mayores amenazas. Como consecuencia de estas transformaciones, los suelos se compactan, se modifica la estructura de la vegetación y se reduce la presencia de heces, de las que los escarabajos peloteros se sirven para acoger y alimentar a sus larvas.

El uso extendido de medicamentos veterinarios también repercute en los escarabajos, ya que contaminan el estiércol del que se sirven; como influye, especialmente, la transformación de antiguos pastizales en terrenos agrícolas e incluso forestales.

La UICN aboga por medidas concretas como un cambio en la legislación que incremente el control de las medicinas para el ganado, de modo que no se administren abusivamente. El escarabajo pelotero no cuenta con la protección legal de la que otras especies se sirven, como la Directiva de Hábitats de la UE y el Convenio de Berna sobre la Conservación de la Vida Silvestre y del Medio Natural.

En palabras de la directora de la unidad para la conservación de especies del Programa Global de Especies de la UICN, Ana Nieto, el «informe muestra la relación entre la diversidad de escarabajos peloteros y los cambios producidos por el hombre». En él, además, se «confirma la importancia de incluir este carismático grupo de especies en una Lista Roja de la biodiversidad mediterránea más completa y representativa».

El director del centro de cooperación del Mediterráneo de la misma organización, Antonio Troya, insiste en la necesidad de un «gran impulso» en el área mediterránea para que no continúe la actual pérdida de biodiversidad, de modo que pueda llegar a las generaciones futuras. En este contexto, especies como las de los escarabajos peloteros podrían perderse si no se toman medidas. El abandono en todo el continente europeo de prácticas ancestrales como la trashumancia, que traslada el ganado de un lugar a otro buscando las mejores condiciones estacionales, aumentará previsiblemente la presión sobre estos insectos, advierte.