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Los Pajes de las Fiestas realizaron este domingo el denominado «paseo» después de la misa.

La compañía Martín Soriano Zaplana se prepara para La Bajada de la Patrona

La ciudad acoge este lunes su gran día: la llegada de la Virgen del Castillo

ÁNGEL ALONSO

Lunes, 7 de diciembre 2015, 01:00

Este ñunes es el día. La llegada a Yecla de la Virgen del Castillo es uno de los momentos cumbre de las Fiestas que se vivirán en La Bajada con la intensidad que se merece. Desde las 9.00 horas, los arcabuces empezaron a lanzar lenguas de fuego. Mientras tanto, el domingo se celebraron los actos previos a este gran día. Entre ellos, la Misa de Pajes oficiada en San Francisco por el párroco, José Antonio Abellán.

Nada más terminar la homilía, la comitiva realizó el tradicional paseo con los Pajes del Bastón y la Bandera abriendo la comitiva, escoltada por los Sargentos Alabarderos, 'los tíos de las Punchas'. Una de las paradas obligadas fue, como es tradición, el asilo de ancianos donde los Mayordomos fueron a saludar a las monjas y a los mayores que conviven allí. La noche trajo el llamado 'Beso de la Bandera'. Se trata de un acto que en los orígenes de las fiestas se realizaba en la casa del Mayordomo.

En la plaza Sebastián Pérez, cientos de arcabuceros se adueñaron del recinto. Vestidos con los trajes tradicionales, las escuadras fueron pasando por debajo de la insignia para jurarle fidelidad a María.

Se trata de un acto castrense que, como es habitual y pese a que las temperaturas ya eran bajas, congregó a mucho público deseoso de ver por primera vez jugar la bandera al Mayordomo de este año, Narciso Botía, y a los últimos 5 Mayordomos, quienes revivieron la sensación única de tener entre sus manos la insignia.

Homenaje a los Pajes

Durante la noche del pasado sábado, además, se realizó en el Teatro Concha Segura un nuevo acto que ha tenido gran aceptación. Se trata de un homenaje que la Asociación de Mayordomos organizó para los Pajes más veteranos. Unas 150 personas, que en su día representaron una de las figuras más llamativas de las celebraciones, acudieron a la llamada.

La afluencia de público a la comida, que superó las 300 personas, obligó a la organización a un cambio de ubicación para el acto que, inicialmente, se iba a desarrollar en el auditorio municipal; pero que fue trasladado al Teatro Concha Segura.

Allí, la presentadora y organizadora de la difícil tarea de contactar con los antiguos pajes, María Martínez Rovira, explicó la iniciativa y la emoción que ella misma sentía como Paje que fue. La Asociación de Mayordomos intentó reunir al mayor número de pajes de buena parte del pasado siglo, «aunque ha sido complicado, pero creo que debemos tener un registro con los nombres de cada año», comentó ante el público el Presidente de la Asociación de Mayordomos, José Francisco Puche.

Por su parte, el alcalde de Yecla, Marcos Ortuño, comentó la emoción que habían sentido muchos de los pajes al recordar aquel año inolvidable en sus vidas. También agradeció el esfuerzo que muchos de ellos habían hecho para asistir al acto.

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