La Unión de Pequeños Agricultores achaca los altos precios de los alimentos a la «especulación» y no a la caída de las producciones
Marcos Alarcón, secretario general de UPA, asegura que algunas de las últimas subidas no responden a la escasez de producto sino a otras causas. «El aceite no está hoy en manos de los productores sino en las de las almazaras y los envasadores»
Tania Costa
Murcia
Jueves, 31 de agosto 2023, 12:02
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de la Región de Murcia asegura que este año se ha producido «una reducción generalizada de la producción» tanto de secano como de regadío por las inclemencias meteorológicas (sequía, altas temperaturas, pedrisco o lluvias torrenciales), pero los altos precios que pagan los consumidores no se pueden achacar a esta situación sino a la «especulación».
«El aceite no está hoy en manos de los productores sino en las de las almazaras y los envasadores. Esos altos precios no se están transformando en ingresos extraordinarios para los agricultores, que no intervienen en el precio final de venta al público», señaló Marcos Alarcón, secretario general.
Como consecuencia, asegura que hay un deterioro de la renta agraria que se ha visto agravada por el aumento de los costes de producción. Para remediarlo, desde UPA piden que el Gobierno regional, para hacer cumplir la Ley de la Cadena Alimentaria, haga estudios de costes de producción mínimos para evitar que se obligue a los agricultores a firmar contratos con una «cláusula leonina» que tienen que aceptar para no dejar la fruta en el árbol. Esto los lleva a confesar implícitamente al firmar el contrato que les están pagando precios por encima de sus costes de producción cuando en muchos casos no es así.
«Que la ley se cumpla en ese primer eslabón y no se permita que los agricultores sigan recibiendo precios por debajo de costes de producción», insistió el secretario general de UPA.
De esta forma lo explicó este jueves Alarcón, que habla de «un mal año» para el campo al hacer un balance de la primera mitad de este 2023, marcado por «la incidencia del clima», lo que, en su opinión, pone sobre la mesa «la urgencia y necesidad de adecuar el sistema de seguros agrarios» para afrontar las pérdidas provocadas por la meteorología.
Alarcón destacó que las ayudas recibidas han sido dispares. Por una parte, está el Gobierno central, que «ha realizado un esfuerzo presupuestario sin precedentes con partidas millonarias, pero insuficientes», mientras que el Gobierno de la Región «no ha comparecido».
Para definir este «año malo» desde UPA destacaron que se espera obtener un 50% de la cosecha normal de frutos secos como la almendra, que se la juega este fin de semana si las lluvias van a más; del 60-70% de la uva de vinificación en secano y del 75% en regadío; del 30% de lo normal a nivel regional de la aceituna; «una campaña complicada» del brócoli; el tomate, «muy afectado por la competencia desleal de Marruecos y los efectos climáticos» y la fruta de hueso, que registró la peor campaña en 10 años. Además, se perdió el 100% del cereal.
En el caso de las producciones ganaderas, UPA resalta el incremento de los «elevados costes de producción», que se reflejan en el encarecimiento del pienso para la alimentación animal y en los costes de la energía. «Como consecuencia de la sequía, los precios de la paja, que se han triplicado, y el cereal son desorbitados», recalcó Alarcón.
También de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE), que no se ha detectado en ninguna explotación de la Región, aunque ha aparecido den ciervos de Moratalla y Caravaca. Las consecuencias económicas de la EHE mantienen en vilo a los ganaderos, que han pedido al Ministerio una reunión para abordar esta situación y que esta enfermedad pueda ser incluida dentro de las campañas de saneamiento oficiales para que si se produce un incremento de costes o el sacrificio de algunos animales, los ganaderos puedan ser compensados ante la subida de costes.
A esto hay que añadir los efectos de la meteorología en la sandía y el melón, cuya producción se vio afectada por el pedrisco, sobre todo en Lorca, y que también sufrió el impacto de las olas de calor. En todo caso, aclaran que los precios no tienen que ver con esto sino con la especulación.
«Quienes se han aprovechado son los supermercados que son quienes hacen el agosto», dijo Antonio Moreno, secretario de Agricultura y Agua de UPA.
Formación de Gobierno
Sobre la formación de nuevo Gobierno en la Región, desde UPA aseguran que con 1.200 afiliados no tienen capacidad de influencia ni pesan mucho sus preferencias, pero piden al nuevo Ejecutivo ya sea en solitario o en coalición o el que salga de una nueva repetición electoral, que actúe con políticas propias, presupuestos suficientes para hacer políticas dirigidas a agricultores y ganaderos y que no se dedique solo a «criticar lo que haga el Gobierno de España».
En Agricultura piden un consejero que apueste por "la interlocución real" con las organizaciones agrarias y más presupuesto para los seguros agrarios.