La UMU afronta las primeras cotizaciones sociales de 2.000 alumnos en prácticas
La Universidad de Murcia comienza a dar de alta a estudiantes y prevé llegar a 10.000 por curso; la UPCT cubrirá a casi 1.200
Las universidades de la Región de Murcia han comenzado a asumir la tarea de sufragar las cotizaciones sociales de sus alumnos en prácticas sin ningún tipo de remuneración. De esa manera cumplen con la nueva exigencia normativa establecida por el Gobierno de España, según la cual las empresas u organismos –en condición de empleadores– tienen que asumir los derechos y obligaciones legales de los becarios fijados en el Régimen General de la Seguridad Social. La Universidad de Murcia ha sido la primera en España en dar de alta a sus estudiantes al incorporar a los primeros 2.040 beneficiarios, con fecha del pasado 26 de diciembre.
Así lo reconoció a LA VERDAD la vicerrectora de Estudiantes y Empleo de la UMU, Alicia Rubio, que estima que «se alcanzará a más de 4.000 alumnos en prácticas en el segundo cuatrimestre del curso», aunque ante las dudas surgidas en los procedimientos los nuevos registros se podrán realizar a finales de marzo, si bien con una aplicación retroactiva. En cualquier caso, la estimación es que el volumen de beneficiarios por ejercicio ronde la cifra de 10.000. Eso supondrá el desembolso de alrededor de 300.000 euros al año.
La aplicación práctica desde ayer del Real Decreto 1493/2011, tras la moratoria de los últimos meses, ha empezado a acelerar los procesos de gestión, una vez que se han adaptado los convenios de colaboración a los nuevos requisitos. Hay que tener en cuenta que se trata tanto de prácticas curriculares –obligatorias en los planes de estudios–, como las extracurriculares, que son las voluntarias para ampliar la formación. En el caso de estas últimas, la mitad de ellas cuentan con beca en la UMU.
Casi la totalidad de empresas y entidades con convenios dejan el pago por los becarios a cargo de las instituciones docentes
También la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) está lista para afrontar el abono por las 1.193 plazas de prácticas. Una medida que supondrá un coste para la institución de unos 50.000 euros. Unos volúmenes económicos a los que añadir el gasto burocrático y administrativo debido a los costes indirectos de personal y los cambios informáticos necesarios. Se trata de un coste de cerca de 60 euros por alumno y mes para cubrir el 5% de cotización exigido, toda vez que existe una bonificación por parte del Estado del 95%.
Las universidades asumirán la práctica totalidad del desembolso, tal como refrenda el dato de la cesión de esa responsabilidad por parte de las empresas en el 98% de los casos en la UMU, según admite la vicerrectora Rubio.
La Universidad Católica de Murcia (UCAM) también asumirá íntegramente las cotizaciones de sus 7.000 estudiantes de las diferentes titulaciones en el último cuatrimestre. En su caso cuenta también con alumnos de FP Superior.
Precisamente, en cuanto a los estudiantes de Formación Profesional, será la Consejería de Educación quien asuma el pago de las cotizaciones del alumnado de centros sostenidos con fondos públicos que realice prácticas formativas en empresa. Hasta 14.000 estudiantes de Secundaria realizarán las mismas entre los meses enero a julio de 2024, pero la mayoría se inician a partir de marzo.