Salud vacunó a personal de empresas externas que no trabaja en los hospitales
Correos entre el servicio de Riesgos Laborales del SMS y la adjudicataria Zardoya Otis demuestran la ausencia de criterios definidos y de controles
Salud vacunó a trabajadores y encargados de servicios gestionados por empresas externas que en realidad no trabajan en los hospitales. Así queda reflejado en una ... serie de correos electrónicos que intercambiaron la coordinadora de Riesgos Laborales del área Murcia Oeste y Zardoya Otis, la adjudicataria encargada del mantenimiento de los ascensores en La Arrixaca. Según se recoge en los e-mails, solo nueve operarios de esta empresa trabajan de manera habitual en este hospital, pero finalmente fueron 17 las personas que recibieron la primera dosis, entre el 18 y el 19 de enero.
Un representante de Zardoya Otis planteó en diversas ocasiones a Riesgos Laborales del Servicio Murciano de Salud (SMS) sus dudas sobre el proceso. «La vacunación, ¿debería extrapolarse al personal directo de nuestra empresa que pudiera acceder a las instalaciones de La Arrixaca? Como por ejemplo algún personal administrativo, comercial, delegado. Es personal que a veces accede para facturación, gestión comercial, gestión de mantenimiento, etc. Y que está en contacto directo con el personal de mantenimiento Otis que sí está permanente en el hospital», señala este empleado de la adjudicataria en un e-mail enviado a las 9.51 del martes 19 de enero, y al que ha tenido acceso LA VERDAD.
La coordinadora de Riesgos Laborales de La Arrixaca ofrece una respuesta de la que se desprende la falta de indicaciones claras por parte de sus superiores en el SMS y en Salud Pública: «Yo entiendo que se refiere a todo el personal que acceda al hospital con motivo de su trabajo, independientemente de su puesto de trabajo, aunque el personal de mantenimiento de Otis sea el más expuesto». Finalmente, apostilla: «No lo penséis mucho, que tenéis esta mañana». Es decir, la decisión final de a quiénes se incluía en el listado de vacunación quedaba en manos de la propia empresa.
La decisión de a quién incluir en los listados quedó en manos de las propias concesionarias: «No os lo penséis mucho, que tenéis esta mañana»
Previamente, en otros correos electrónicos, esta misma responsable de Riesgos Laborales había indicado que podía pasar a vacunarse «todo el personal que accede a La Arrixaca». Y añadía: «A mí me constan nueve trabajadores». Pero, tras las posteriores consultas, finalmente en el listado de vacunación se incluyó a 17 personas. Entre ellas, administrativos, comerciales y al menos un cargo directivo de gestión.
«Entiendo que todos»
La falta de criterios claros queda patente en otro e-mail enviado por la coordinadora de Riesgos Laborales en La Arrixaca a su interlocutor en Zardoya Otis: «Te envío el acta de entrega del manual de información que yo tengo, pero es posible que haya cambios y no me lo hayan dicho. Yo entiendo que pueden vacunarse todos los que puedan acceder al hospital, y sobre todo los trabajadores usuales».
Este criterio tan flexible se convirtió en un cajón de sastre al que podían acogerse trabajadores, encargados y hasta directivos de empresas externas que en realidad no trabajan en los hospitales, y que solo de manera ocasional acceden a los centros sanitarios. Pero, además, en la situación de pandemia esas visitas se han reducido al mínimo, y muchas gestiones se hacen por teletrabajo. La dirección de Zardoya Otis no hizo ayer declaraciones.
Las dosis se administraron antes de que se elaborase un protocolo
La vacunación de los empleados de empresas externas de La Arrixaca se llevó a cabo entre el 18 y el 19 de enero, cuando todavía ni el Servicio Murciano de Salud (SMS) ni Salud Pública habían definido un protocolo específico. Como reveló LA VERDAD, hasta el día 21 de enero no se validó una tabla con los criterios para determinar qué trabajadores de estas empresas debían ser inmunizados en esta primera fase de la campaña. Parte del personal incluido en el listado de Zardoya Otis no cumplía con esos criterios, según se desprende de los e-mails.
La Consejería señaló ayer que «las instrucciones» eran que «se vacunara a personal de mantenimiento que trabajase en el hospital». Cualquier vacunación de otro personal «habrá sido una situación incorrecta que no cumple las instrucciones». Salud no aclara sin embargo si ha detectado alguna irregularidad en el listado de Zardoya Otis o en los de otras empresas adjudicatarias. Ni siquiera consta que los haya revisado.
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