Los regantes llevan pagados 578 millones a las autonomías del Tajo por los trasvases

El Scrats explica que los pagos realizados entre los años 1986 y 2023 ascienden a 353 millones de euros, mientras que el valor actualizado de las transferencias realmente efectuadas asciende a 578,43 millones.

De acuerdo con la ley, las regiones de la cuenca del Tajo deben destinar ese dinero a la ejecución de obras hidráulicas y de ingeniería sanitaria en sus respectivos territorios. El dinero procede de una parte de la tarifa que abonan los regantes por el agua trasvasada del Tajo, que quedó establecida en unos 13 céntimos por metro cúbico en agosto del año 2021, cuatro veces más barata que el precio bonificado que se paga actualmente por el agua desalada.

La tasa es mayor en el caso de los abastecimientos, que asciende a 20 céntimos. Aparte está la tarifa de peaje por el uso de la infraestructura, que es de 4,8 céntimos. Suponiendo que este año hidrológico se trasvasen unos 300 hectómetros para los abastecimientos y regadíos del Segura, los recursos del Tajo acarrearían un desembolso de más de 45 millones de euros.

Los regantes deben abonar un canon anual fijo de 13 millones de euros con independencia del agua que consuman. Algo de lo que siempre se han quejado porque ese coste lo imputa el Ministerio desde la etapa de Mariano Rajoy a la asignación nominal de agua, y no a los volúmenes realmente desembalsados.

La tarifa está compuesta por el coste de las obras, los gastos fijos de mantenimiento y los gastos variables de funcionamiento, que son los más elevados y están sujetos a la factura energética. La tarifa ha fluctuado mucho a lo largo de la vida del acueducto. Empezó con 3,7 céntimos en el año 1981 (equivalentes al valor de la peseta de la época), y su máximo escaló hasta los 17,4 céntimos en 2009. Como media, se ha movido en el entorno de los 12 céntimos.

Una parte de la tarifa se destina a los gobiernos de Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura, con el añadido de que a estos pagos no se les suele aplicar las exenciones que aprueba el Ministerio en situaciones de extrema sequía para ayudar a los regantes. Los años en los que más dinero se ha transferido a estas regiones han coincidido habitualmente con los de mayores desembalses del Tajo al Segura, y dependiendo del momento. El máximo anual ha sido de 18 millones, y el mínimo de 2,3.

El Sindicato de Regantes explica que desde la fecha de entrada en vigor de las tarifas del Trasvase y hasta el 31 de diciembre de 1985, se transfirieron a las confederaciones hidrográficas del Tajo y el Segura los importes recaudados por la componente 'a' de las tarifas (coste de las obras). Todo ello fue modificado a partir de 1986, ya que, mediante un acuerdo del Consejo de Ministros –que a juicio del Scrats incumplía claramente una de las leyes del Trasvase– las cantidades obtenidas por la parte de la tarifa correspondiente al coste de las obras pasó a destinarse íntegramente a las comunidades autónomas de Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura en las proporciones de 4/9, 3/9 y 2/9, respectivamente, para la ejecución de obras hidráulicas y de ingeniería sanitaria en sus territorios, principalmente en los municipios de la cabecera del Tajo.

Coincidiendo con los momentos de mayor tensión, los regantes del Trasvase y los gobiernos de la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana pidieron explicaciones sobre las obras hidráulicas ejecutadas por las comunidades de la cuenca cedente con cargo al dinero recibido por los trasvases.