La parálisis del presupuesto estatal arroja dudas sobre la ampliación del tranvía de Murcia

Dicha parálisis se debe a la imposibilidad del Gobierno de Pedro Sánchez para sacar adelante el techo de gasto y abordar el próximo presupuesto, ante la negativa de PP, Vox y Junts a apoyarlo. La situación arroja dudas sobre la aportación que debe hacer el Ministerio de Transportes para el tranvía, aunque el Ayuntamiento considera que en estos momentos «es más importante tener firmado el protocolo».

Otro de los proyectos emblemáticos de la ciudad de Murcia, que depende del presupuesto estatal a través del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, es la recuperación del yacimiento de San Esteban y su entorno, que está pendiente de la firma de otro convenio entre las tres administraciones, valorado en 32,7 millones de euros. En este caso, sí existe consignación en los Presupuestos del año 2023, el último vigente, aunque tan solo con una dotación de 200.000 euros.

Para la ampliación del tranvía desde la plaza Circular hasta la estación del Carmen, el Ayuntamiento de Murcia pretende firmar el mes que viene el convenio con el secretario de Estado de Transportes y Movilidad, José Antonio Santano, quien acordó con el alcalde José Ballesta el aumento de la aportación estatal hasta cubrir un tercio del coste total.

El nuevo convenio que se está ultimando es una modificación del anterior, en el cual se incrementa el coste de 70 a 92,7 millones de euros. El Consistorio debería buscar financiación para los dos tercios restantes, y confía en que la Comunidad Autónoma asuma un tercio. Las arcas autonómicas también deberán sufragar los costes de la reordenación urbanística del entorno del Carmen y de la nueva estación de autobuses soterrada, en función de su cuota de participación en la Sociedad Murcia Alta Velocidad.

El equipo de gobierno señala que no existe asignación para el tranvía en los anteriores Presupuestos del Estado –lo cual facilitaría el desarrollo del proyecto–, y apunta que el Ministerio «tendría que buscar una consignación presupuestaria» y que quede reflejada en el convenio. Una prórroga de las cuentas impediría que se puedan financiar proyectos y gastos nuevos, coinciden diversas fuentes.

El tranvía de Murcia superó el año pasado los 7,3 millones de viajeros, y en este ejercicio alcanzará los 9 millones. El proyecto prevé la construcción de unos dos kilómetros de nuevo trazado, a través de la Gran Vía, con cinco paradas. Se considera una inversión muy cara en comparación con el coste que tienen otras infraestructuras de transporte. Con la ampliación se alcanzarán los 15 millones de viajeros al año.

En fases posteriores, el tranvía se podría ampliar hasta El Palmar y Alcantarilla, dentro del área metropolitana. También se encargó un estudio para su posible prolongación hasta Molina de Segura.

En relación al yacimiento de San Esteban, también sigue pendiente la firma del convenio entre las tres administraciones. El coste se ha incrementado de forma considerable, al pasar de 17 a 32,7 millones de euros. Uno de los trámites pendientes está en el tejado de la Consejería de Turismo y Cultura, puesto que la Dirección General de Patrimonio –vacante desde julio y con un nuevo gestor recién nombrado– aún no ha emitido su informe. El departamento de Carmen Conesa informa de que el equipo redactor del proyecto «está ultimando las modificaciones y mejoras que plantearon la Dirección General de Patrimonio Cultural, la Dirección General de Patrimonio de Hacienda y el Ayuntamiento de Murcia. Una vez subsanados estos reparos, la documentación definitiva será enviada al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, previsiblemente a principios de octubre».

Este último le dará traslado a la Comunidad y al Ayuntamiento con el fin de informar el proyecto de ejecución, que a su vez será supervisado por la Oficina Técnica del Ministerio. También se ultima el convenio tripartito para poner en valor el yacimiento arqueológico y recuperar la plaza, apunta la Consejería.

La Región sigue arrastrando los retrasos en la ejecución de inversiones que se van deslizando de un año a otro, a lo cual contribuye la prórroga de los Presupuestos del Estado del año 2023, vigente en tanto que el Gobierno central no apruebe unas nuevas cuentas para 2025. Entre estos proyectos, se encuentran el Arco Norte de Murcia, los terceros carriles de las autovías A-7 y MU-30 y la regeneración de la bahía de Portmán.

A la espera de que se desbloquee o se agrave la situación de parálisis presupuestaria, la Región aguarda a que el Ministerio de Transportes y Movilidad licite las obras del Arco Norte, como apuntó recientemente el secretario de Estado, José Antonio Santano. En abril, el Ministerio apuntó que esta obra estaba pendiente de las «disponibilidades presupuestarias» y, últimamente, se había mostrado más proclive a priorizarlas. El departamento de Óscar Puente sí está agilizando la construcción del Arco Noroeste, para que entre en servicio el año que viene.

La regeneración de la bahía de Portmán sigue en el limbo; mientras que las ciudades de la Justicia de Cartagena y Lorca tenían pequeñas cantidades asignadas en los Presupuestos de 2023, que pueden ser redotadas.

La prórroga presupuestaria no haría mella en las grandes empresas y organismos públicos, como Adif, Acuamed y Navantia (submarinos), entre otros, que aportan los mayores volúmenes de inversión estatal. Las obras de la línea de alta velocidad Murcia-Almería (incluyen la estación del Carmen y los soterramientos), así como las de Cartagena con Murcia, seguirán con su ritmo. Gran parte de la financiación está vinculada a los fondos 'Next Generation', al igual que sucede con los proyectos para la ampliación de las desaladoras de Torrevieja, Valdelentisco y Águilas, a cargo de Acuamed.