Nueve detenidos en Murcia por robar 3.604 kilos de cable de cobre telefónico en Albacete y Jaén
Los arrestados, de entre 19 y 50 años y que contaban con numerosos antecedentes por hechos similares, cometieron los hurtos en los municipios manchegos de Pozohondo, Pozo Cañada y Peñas de San Pedro y en el jienense de Beas de Segura
efe
Martes, 28 de enero 2020, 17:21
Efectivos de la Guardia Civil de Albacete detuvieron a nueve personas, de entre 19 y 50 años de edad, vecinas de Murcia, presuntas autoras de seis delitos de hurto de cable de cobre telefónico, en una operación que permitió recuperar 3.604 kilos de cable de cobre robado. Estos seis hechos delictivos, ahora esclarecidos por la Guardia Civil, se cometieron en los términos municipales de Albacete, Pozohondo, Pozo Cañada y Peñas de San Pedro, de la provincia de Albacete, y en la jienense de Beas de Segura, según informó la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete en una nota de prensa.
Los detenidos ya contaban con numerosos antecedentes por hechos de similares características. Fue una patrulla de la Guardia Civil de Riópar (Albacete) la que, en un servicio para prevenir este tipo de robos, observó la presencia de un vehículo que les resultó sospechoso, cuando circulaba por la carretera N-322 y cuyo conductor hizo caso omiso a las señales de parada de los agentes uniformados.
A raíz de esta fuga, los operadores de la Central Operativa de Servicios de la Guardia Civil albacetense, que atienden el teléfono de urgencias 062, coordinaron un dispositivo para el que movilizaron varias patrullas cercanas a la zona para tratar de detener el vehículo e identificar a sus ocupantes.
Fruto de este dispositivo, una de estas patrullas consiguió parar al vehículo fugado además de un furgón que circulaba a escasa distancia y que se sospechaba que podía tener relación con el anterior. Tras la identificación de los ocupantes de ambos vehículos, nueve en total, se registraron los mismos y se localizó en el interior del furgón 600 tramos de cable de cobre del utilizado en los tendidos telefónicos de unos 2 metros de longitud, lo que facilitaba su transporte. Este cable de cobre, con un peso de 3.604 kilos, quedó intervenido en el lugar de su hallazgo al no poder acreditar ninguno de los identificados su legítima procedencia.