Motas achaca el aumento del paro a la metodología de la EPA

La Región de Murcia es la única comunidad que gana ocupados con respecto a hace un año y la tercera autonomía del país que más empleo ha generado desde que finalizó el primer confinamiento. Esta es la lectura positiva que realiza el consejero de Empleo, Investigación y Universidades, Miguel Motas, de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondientes al tercer trimestre de 2020.

Motas achacó el incremento del número parados, que ha aumentado en 19.300 personas, a la propia metodología de la EPA, que considera desempleados a las personas que no están trabajando, que están en disposición de trabajar y que están en búsqueda de empleo. Estas dos últimas variables no eran posibles durante el confinamiento, por lo que en la encuesta del segundo trimestre a estas personas se les consideraba inactivas en lugar de paradas. Ahora, con la cuarentena levantada, vuelven a ser consideradas paradas.

Por tanto, entiende el consejero que los datos de la EPA invitan «a un moderado optimismo», pues se han recuperado 28.500 empleos durante el confinamiento (principalmente en la Construcción, mientras que la Agricultura es la que más pierde), por encima de la media nacional, y la tasa de paro, pese a situarse en el 17,21%, «está muy lejos de los niveles que se alcanzaban en la anterior crisis de 2008», cuando se llegó al 30%.

«Dentro de lo que se podía esperar, estamos relativamente bien con respecto a otras comunidades autónomas. No obstante, no podemos dejar de seguir trabajando para tratar de minimizar los efectos de esta crisis sobre el empleo. Estamos en la fase crítica que hay que ayudar a los trabajadores afectados por los ERTE, a los autónomos y a la hostelería», concluyó el consejero en la comparecencia telemática.

La patronal murciana CROEM advierte de que el mercado laboral, tanto nacional como regional, continúo en el tercer trimestre de 2020 con registros fuera de lo común para esta época del año, debido a las extraordinarias condiciones derivadas de la crisis sanitaria asociada a Covid-19.

En términos anuales, la Región acumula 26.500 parados más (+26%, frente al +15,8% nacional) y 500 ocupados más (+0,1% y -3,5% España) que hace un año. En cuanto al comportamiento por sectores, se produce un fuerte descenso de la ocupación en Agricultura (15.300 ocupados menos que en el trimestre anterior). Los demás se recuperan, de modo que aumenta la ocupación en Construcción (+4.000), Industria (+6.800) y sobre todo Servicios (+33.100). En este último, las ramas con evolución más favorable fueron Comercio, reparación de vehículos, transporte y hostelería (+19.600), Actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento (+7.000) y Administración Pública, educación y actividades sanitarias y sociales (+5.000).

Además, aumenta tanto el número de asalariados con contrato indefinido (+13.000) como el de temporales (+18.700), mientras la tasa de temporalidad se eleva al 30,3% (desde el 28,4% del segundo trimestre), cifra todavía superior a la nacional (24,2%).

La Cámara de Comercio de Murcia valora que el futuro inmediato del mercado laboral puede calificarse de «preocupante, sobre todo para sectores especialmente afectados por la limitaciones de la vida social, como son turismo, hostelería y comercio».

Los empresarios reclaman intensificar las medidas de apoyo, tales como una mayor dotación de ayudas para mantener la liquidez de las empresas, especialmente a las pequeñas y medianas, así como a los autónomos, para evitar su quiebra y que puedan mantener la actividad, protegiendo así el empleo, con planes específicos para los sectores de comercio, tursimo y hostelería.

También estima necesario un aplazamiento del pago de las cuotas a la Seguridad Social, sin coste financiero, para todas las empresas, según informaron fuentes de la institución cameral en un comunicado.

Finalmente, los empresarios apelan a la responsabilidad de los políticos para alcanzar acuerdos en cuestiones esenciales para la gestión de la pandemia, así como unos Presupuestos Generales que demuestren estabilidad institucional, tanto en el ámbito nacional como en el internacional para no desincentivar la inversión.

Desde la Cámara de Comercio de Murcia se subraya la preocupación por los efectos que el nuevo estado de alarma tendrá en el mercado laboral, sobre todo considerando tanto el mantenimiento de más de 10.500 trabajadores en situación de Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) a finales de septiembre, como la obligación de mantener el empleo durante seis meses para los trabajadores reincorporados tras un ERTE y que, una vez finalizado ese periodo, dependen de la actividad de su empresa.

El sindicato muestra su «preocupación» por el impacto que esta crisis ha tenido sobre el empleo de la Región, pero «muy especialmente» por la «precariedad en la que se está sustentando la recuperación económica», según informaron fuentes de UGT en un comunicado. Una recuperación económica que, por ello precisamente, «está resultando ser muy frágil y vulnerable a un empeoramiento de la situación sanitaria como el que estamos viviendo en estos momentos», según UGT.

En los próximos meses, además, advierte que «afrontaremos nuevas incertidumbres y problemáticas para el empleo regional, a pesar del sostén de los ERTES, como consecuencia de las nuevas restricciones impuestas a la actividad con el nuevo estado de alarma y de que mucho empleo estacional que habitualmente se genera con la campaña de Navidad en los últimos meses del año puede no llegar a generarse».

UGT lamenta el mal comportamiento del empleo agrícola en este trimestre, teniendo en cuenta que es un sector esencial que no debería haberse visto especialmente perjudicado por la pandemia, «introduce otro factor de riesgo para la economía regional, sobre el que debería actuarse con inmediatez para atajar una destrucción de empleo y una precariedad que resultan llamativamente significativas».

«Lo prioritario es controlar la situación sanitaria, pero también asegurar condiciones de seguridad en los centros de trabajo para minimizar los contagios por esta vía y procurar adecuados mecanismos de protección social y de mantenimiento del empleo para los trabajadores y trabajadoras», tal y como ha destacado el sindicato.

En su opinión, «deben mantenerse los estímulos públicos y las políticas expansivas, pero no solo para aportar soluciones coyunturales, sino también con el punto de mira puesto en un futuro que estimule un modelo de crecimiento basado en la sostenibilidad, la innovación, la tecnología, la calidad de nuestros productos y servicios y, por supuesto, del empleo que los sostiene».

«La nueva Estrategia Regional de Empleo de Calidad y los recursos que podamos obtener de los Fondos UE serán, sin duda, una buena oportunidad para ello, que esperamos cuenten con la participación efectiva de los Agentes Sociales», concluye.