Material escolar y libros suponen más de la mitad de las deducciones en la renta

Del total de deducciones autonómicas aplicadas en la Comunidad, a partir de los últimos datos publicados del ejercicio 2021, que alcanzaron a 55.920 contribuyentes, 31.133 se aplicaron para aliviar los costes escolares familiares en cuanto a los mencionados gastos de material y libros de texto. De esa manera, el importe conjunto deducido en este ámbito se eleva por encima de los 4,5 millones de euros, sobre un ahorro global para los bolsillos de los murcianos de 9 millones entre todas las deducciones. Esas cifras dejan una media de rebaja impositiva en este apartado de 146 euros. Hay que tener en cuenta que en este caso se cubre un 20% del desembolso, hasta llegar a un máximo de 120 euros por niño.

Igualmente, la deducción por los gastos de guardería supone otra de las ayudas con mayor protagonismo a nivel regional, con un volumen de 5.953 para un ahorro por encima de los 1,1 millones de euros. Eso refleja un promedio superior de 193 euros, que también se queda por encima del valor medio para el conjunto de declaraciones con deducciones, que fue de 162 euros.

Aunque por delante en cuanto a las cifras de beneficiarios e importe ahorrado se queda la de contribuyentes con discapacidad, a la que se acogieron 13.911 personas en dicho ejercicio, con un montante económico de más de 1,4 millones de euros. Eso sí, el valor medio de beneficio en este caso es inferior, 103 euros.

Una cantidad que claramente se queda por debajo del propio límite marcado para deducir 120 euros al año. Por otra parte, los requisitos para acogerse establecen un grado de discapacidad igual o superior al 33%, así como que la suma de la base imponible general y la del ahorro en la declaración sea de 19.000 euros en la modalidad individual y de 24.000 euros en la conjunta.

Dentro de un escalón inferior de las deducciones autonómicas más utilizadas sobresalen las de adopción o nacimiento de hijo, que contabiliza 2.865, aunque con una media de ahorro modesta, de 96 euros, en función del importe global de 273.250 euros; y la de por donativos para la protección del patrimonio cultural o promoción de actividades culturales, que marcó una rebaja impositiva media de 274 euros para 2.368 contribuyentes, ante un cuantía de 649.263 euros.

Otro aspecto reseñable es que las deducciones autonómicas en el IRPF han ido aumentando progresivamente con los años, ya que de las 13 contabilizadas por ejemplo en 2020 y 2021 se pasó a 15 en 2022 con la incorporación de las de arrendamiento por vivienda habitual y las de mujeres trabajadoras por cuidado de hijos y personas con dependencia. Mientras que para la campaña de 2023 el Gobierno regional ha implantado otro par más, hasta alcanzar 17: una para familias numerosas ante la adquisición o ampliación de la vivienda habitual, y otra para donaciones de bienes inscritos en el inventario del patrimonio cultural de la Comunidad.

No obstante, aunque el volumen de beneficiarios de las deducciones aumenta cada año, en función de la mayor disponibilidad de opciones, su incremento efectivo es todavía pequeño, ya que el 8,1% registrado sobre los casi 695.000 contribuyentes de la Comunidad en 2021 es apenas tres décimas superior al 7,8% alcanzado en 2020.

«Existe mejoría, pero hay deducciones que llegan a muy pocas personas», hace hincapié a LA VERDAD el secretario general de Gestha, José María Mollinedo. Y es que falta un mayor conocimiento de esas medidas de carácter social con las que se pretende aliviar la presión fiscal sobre las personas con rentas medias y bajas. Un ejemplo claro, al respecto, lo representan la deducción por conciliación -que cubren el 20% de las cuotas ingresadas por cotizaciones en el sistema especial de empleados de hogar- que utilizaron apenas 67 personas. Y lo mismo ocurre con las de acogimiento no remunerado de mayores de 65 años y personas con discapacidad, con tan solo 33.

Los datos de Hacienda muestran que el mayor porcentaje de declarantes con deducciones se produce en el tramo de rendimientos entre 12.000-20.000 euros, donde supone un 22%, seguido por el de 21.000-30.000 donde llegan a ser el 10,9%.

El análisis detallado de las estadísticas de deducciones autonómicas en el IRPF en la Región de Murcia revela cómo ciudadanos con rentas muy altas buscan fórmulas para rebajar su factura fiscal. De hecho, más de 600 declarantes con tramos de rendimiento por encima de los 60.000 euros se acogieron a alguna de las desgravaciones establecidas. Y aunque en realidad solo representen el 3,2% de los 694.035 contribuyentes de la renta en la Comunidad, según los datos definitivos de 2021, es significativo que no renuncien a aplicarse algún tipo de las deducciones ofrecidas, y que no están sujetas a un límite de renta. Tal como ocurre en los casos de donativos para la protección del patrimonio cultural, por inversión en acciones o participaciones sociales en entidades nuevas, así como también en instalaciones de energías renovables y en equipos domésticos de ahorro de agua.

En concreto, un total de 31 contribuyentes murcianos con rendimientos por encima de los 601.000 euros se dedujeron entonces una cuantía global de 6.671 euros, que supone un promedio de 215 euros; mientras que otras 56 personas en el tramo en el IRPF entre 150.000-601.000 euros lograron deducir 19.681 euros, con una media de 351 euros -el valor más alto del conjunto de declarantes-. Y, finalmente, hasta 554 ciudadanos con también un alto poder adquisitivo, con rendimientos entre 60.000-150.000 euros se ahorraron 159.546 euros, con un promedio de 288 euros.