La CHS mantiene en suspenso parte del suministro al Campo de Cartagena
Liberará esos caudales conforme se cumplan las medidas de protección del acuífero; en una asamblea multitudinaria, los regantes dicen que se sienten «coaccionados»
En un ambiente de tensión e inquietud, más de mil titulares y productores del Campo de Cartagena participaron ayer en una multitudinaria asamblea informativa convocada por la Comunidad de Regantes, que propuso solicitar una prórroga genérica a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para poder acreditar el cumplimiento de las medidas cautelares para la preservación del acuífero y evitar el impacto al Mar Menor. El plazo que dio la CHS acaba en un mes, y por el momento el organismo de cuenca mantiene en suspenso parte del suministro de agua de una concesión del río Segura y de las desaladoras de Escombreras y Torrevieja. De hecho, hay más agua retenida, señalan los regantes.
Estos utilizan actualmente los recursos del Trasvase, de algunas depuradoras y del bombeo del Albujón, pero podrían perder también estos volúmenes si no acreditan que cumplen la medidas de protección, como recordaron ayer los dirigentes de la Comunidad de Regantes, que contaron en la asamblea con la asistencia del dirigente del Scrats, Lucas Jiménez. El presidente y el secretario general de la Comunidad de Regantes, Manuel Martínez y Mariano Soto, explicaron que la CHS ha dejado en suspenso 4,2 hectómetros de agua del Segura, y que el martes recibieron una notificación en la que se retienen los recursos de la desaladora de Torrevieja correspondiente al cuarto trimestre. Con estos ya son 20 hectómetros suspendidos. A estos se suman la paralización de la desaladora de Escombreras desde octubre, por el mismo motivo.
Martínez indicó que la CHS tiene que ir liberando estos caudales conforme se vaya acreditando el cumplimiento de las medidas. «No creo que se pueda producir un corte generalizado de agua en el Campo de Cartagena; sería un caos monumental». Instó a los regantes a que presenten la documentación que requiere la CHS, y anunció que solicitarán una prórroga genérica, ya que si se hace de forma individual, eso provocaría un colapso en el organismo de cuenca, incapaz de responder a más de mil solicitudes. Manuel Martínez recalcó que no le gusta las medidas cautelares, pero indicó que hay que cumplirlas. «Soy contrario a estas medidas porque no son la solución al Mar Menor; y de hecho nos opusimos y recurrimos», recalcó. Dicho recurso, dijo, lo acaban de perder en el TSJ, aunque estudian si recurren el fallo.
«Un momento crucial»
No obstante, Manuel Martínez explicó que aunque se eliminen la ley del Mar Menor y las medidas cautelares de la CHS, eso no serviría de nada porque se está tramitando la nueva normativa nacional sobre nitratos, que es tan restrictiva como las medidas ya conocidas. «Nos encontramos en un momento crucial, pero debemos demostrar una vez más que hacemos las cosas bien», comunicó a los regantes.
Esto no evitó que comentara que se está produciendo «una coacción en toda regla. No se puede poner el Derecho al revés. Ellos están muy nerviosos, y a la vez muy fuertes con las medidas», dijo sobre la CHS y el Ministerio. Explicó que la desaladora de Torrevieja está produciendo el agua que tienen asignada y pagada, y se está depositando en el embalse de La Pedrera, de la cual esperan disponer lo próximos meses, ya que de lo contrario la situación se agravaría más.
«¡Vamos a cortar el agua nosotros mismos...; nadie nos ayuda!»
Un regante del Campo de Cartagena se rebeló por la situación que atraviesan y dijo al resto de la asamblea: «¡Vamos a cortar el agua nosotros mismos!», para no esperar a que lo haga la CHS si no consiguen presentar toda la documentación dentro de plazo. Sugirió hacer un paro general, y se lamentó de que «no nos apoya nadie, quitando a la Comunidad de Regantes».
A la asamblea informativa asistieron muchas familias y jóvenes dedicados a la agricultura. Los directivos de la Comunidad de Regantes denunciaron que es la Administración la que «no está cumpliendo» la ley del Mar Menor y las medidas cautelares. Martínez y Soto criticaron que, dos años después, la CHS aún no ha constituido las comunidades de usuarios de los dos acuíferos protegidos. Asimismo, la Consejería tampoco ha puesto en marcha las entidades colaboradotras que deben certificar que se cumplen las medidas, dijeron. Sin embargo, apremian a los regantes con los plazos, indicaron.