Cáritas ayuda a encontrar trabajo a 60 personas en riesgo de exclusión social en Lorca
La organización religiosa celebra el primer desayuno para poner en contacto a 25 empresas con demandantes de empleo
El programa de empleo de Cáritas ayuda a encontrar trabajo a 60 personas en riesgo de exclusión social gracias al programa de empleo que arrancó en septiembre con la colaboración de 25 empresas de distintos sectores. «La mayoría de casos son de éxito», la empleabilidad roza el 90%, dice a LA VERDAD la educadora social Alicia Talavera. La organización religiosa celebró el viernes en el Huerto Ruano el primer desayuno de trabajo para poner en contacto a las empresas que forman parte de esta iniciativa con los demandantes de empleo. Asistieron además el presidente de la patronal, Juan Jódar, y el presidente de la asociación Hostelor, Jesús Abellaneda, que se mostraron dispuestos a sumarse al proyecto.
Bernarda, víctima de maltrato, busca un empleo «que me de estabilidad a mí y a mis hijos». Al separarse de su marido con 50 años, «pasé de tenerlo todo a no tener nada», estuvo meses buscando trabajo sin éxito, hasta el momento solo ha conseguido empleos temporales de limpiadora y en una gasolinera y durante el encuentro con empresas le ofrecieron su primer trabajo estable.
Para Manuel, el programa de empleo fue la tabla de salvación en «una de las peores situaciones de mi vida». Con 32 años, se quedó sin trabajo con dos hijas de corta edad y su mujer enferma. Lo contrataron en Jisap, una de las empresas colaboradoras, dedicada a la ganadería, pese a que no tenía ninguna experiencia en el sector y, a los seis meses, ha firmado un contrato indefinido. «Animo a las empresas a participar, pueden ayudar a mucha gente, para mí han sido ángeles, me han cambiado la vida», manifiesta.
El programa arrancó en septiembre y «la mayoría de casos son de éxito», la empleabilidad roza el 90%, según la ONG
Carlos Cutillas, de Limcamar, ha gestionado en los últimos meses el empleo de cuatro personas a través de este programa. «Estamos muy decididos a favorecer la inclusión social, cualquier persona puede estar en un momento de su vida en riesgo de exclusión, el abanico es tan amplio que no nos lo podemos ni imaginar», asegura.
La técnico de intervención laboral de Cáritas, Carolina González, explica que se realiza un recorrido con cada uno de los demandantes de empleo, desde el apoyo y asesoramiento en la acogida y, después, en la orientación con la elaboración de un itinerario individualizado en el que se le ofrecen las herramientas y los recursos necesarios para salir con éxito al mercado laboral. Los perfiles son «muy variados, hemos tenido hasta un médico que ha encontrado trabajo en una residencia de ancianos». El acompañamiento sociolaboral continúa, la comunicación posterior con el trabajador y la empresa es «la clave para tener tantos casos de éxito», resalta González, que reconoce que es «muy gratificante» comprobar la implicación del sector empresarial.
