Una jueza suspende la expulsión de un marroquí afectado por un incendio mientras trabajaba en el campo
La magistrada explica que el hombre se encuentra bajo tratamiento quirúrgico y que la interrupción del mismo «podría suponer un grave riesgo para su salud»
Apenas faltaban unas horas para que despegase el avión que debía devolverlo a su país cuando decidieron darle un margen. La justicia murciana ha anulado, ... in extremis, la orden de expulsión de un marroquí que resultó herido en un incendio cuando trabajaba en la recogida de fresas en una finca de Mazarrón. El hombre, que sufrió quemaduras en el 40% de su cuerpo, ya ha abandonado el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Murcia, donde se encontraba ingresado, según explicó el abogado José Manuel Muñoz, que representó los intereses del afectado a través del turno de oficio. Ahora está pendiente de entrar nuevamente a quirófano en julio para avanzar en su recuperación.
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Murcia acordó este miércoles la suspensión de la expulsión de este marroquí. En un auto, al que LA VERDAD ha tenido acceso, la jueza explica que, en base a la documentación presentada, este marroquí se encuentra bajo tratamiento médico y quirúrgico tras sufrir un accidente laboral durante la campaña de recogida de la fresa. Sostiene que «la interrupción del mismo, y de la intervención quirúrgica programada podría suponer un grave riesgo para su salud».
La suspensión de esta expulsión, ratificada ahora por el órgano contencioso, ya había sido acordada por un juzgado de instrucción de la capital, que se encontraba de guardia. El letrado José Manuel Muñoz presentó un escrito -un recurso de protección de derechos fundamentales- solicitando esta medida horas antes de que despegase el avión que debía devolver a este marroquí a su país.
El abogado explicó que, a raíz de las quemaduras sufridas, el hombre tiene diagnosticada una enfermedad tromboembólica venosa, de la cual está actualmente en tratamiento, teniendo previstas y programadas la realización de varias intervenciones quirúrgicas. Un argumento que convenció al juez de guardia, que paralizó in extremis la expulsión, y a la magistrada de lo Contencioso, que acordó definitivamente que la marcha a su país quede en 'stand by'. La jueza aclara, no obstante, que esta decisión no supone «de forma efectiva la autorización de estancia o residencia en nuestro país» y que eso se deberá discutir en otro procedimiento.
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