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La Ciudad de la Justicia de Murcia, en una fotografía de archivo. Nacho García / AGM
Investigan un presunto fraude de ayudas en la Escuela de Tauromaquia de Murcia

Investigan un presunto fraude de ayudas en la Escuela de Tauromaquia de Murcia

El magistrado toma declaración como investigados a altos cargos de la entidad

Alicia Negre

Murcia

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Viernes, 20 de mayo 2022, 08:54

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El Juzgado de Instrucción número 3 de Murcia investiga un presunto fraude de subvenciones públicas en la ya extinta Escuela de Tauromaquia (ETRM). El instructor tomó ayer declaración como investigados a Ángel Bernal, administrador de la plaza de toros de Murcia; a su hija, Rocío Bernal, expresidenta de la ETRM; a Alfonso Avilés, exvicepresidente de la institución y presidente del Real Club Taurino de Murcia, y al profesor José Ortín, al que también se indaga por un supuesto caso de abusos sexuales cometidos en el seno de la escuela.

La investigación de los procesados, que están siendo representados por los abogados José María Caballero y Manuel Martínez, parte de unas diligencias desplegadas por el grupo de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional por presuntos delitos de fraude en las subvenciones, falsedad documental y apropiación indebida.

En el atestado, los policías explican que, entre 2016 y 2019, la escuela recibió 227.920 euros en subvenciones por parte de la Comunidad y el Ayuntamiento de Murcia. Ese dinero debía ir destinado «a colaborar en la financiación de los gastos derivados de su actividad docente, así como cualquier otro derivado de la actuación docente subvencionada, con el fin de fomentar y promocionar la fiesta del toro».

La Policía, sin embargo, incluye en su atestado la declaración de alumnos y familiares que aseguran haber costeado de su bolsillo los novillos, los entrenamientos y los desplazamientos. Los investigadores sostienen, además, que los acusados presuntamente solicitaban a estos alumnos que pidiesen las facturas a nombre de la escuela para poder utilizarlas en la justificación de las ayudas. La Policía estima que el fraude habría alcanzado los 106.000 euros.

Los investigados, según explicaron fuentes cercanas al caso, remarcaron que siempre cumplieron con la legalidad y que no presentaron facturas falsas. Remarcaron además que la Comunidad nunca les reclamó nada respecto a estas subvenciones. Defendieron, asimismo, que la escuela era deficitaria y que a Ángel Bernal le costó dinero.

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