Secciones
Servicios
Destacamos
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Lunes, 30 de noviembre 2020, 15:36
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
«El drama es que después de hasta 80 años de vida aquí, nadie se haya acercado a nosotros, ni extraoficialmente, para explicarnos cómo se van a ejecutar las obras; somos los primeros interesados en que se saquen las vías, pero no se puede hacer de cualquier manera», señalaba ayer Manuel Muñoz, portavoz de los vecinos de Barriomar afectados por las futuras expropiaciones. Estos comenzaron a organizarse el pasado domingo para hacer valer sus reivindicaciones.
Muñoz, que lleva 66 años residiendo junto al trazado, recuerda que esta zona, llena de viviendas antiguas y unifamiliares, está poblada por numerosas personas mayores, incluso ancianos con importantes grados de discapacidad, por lo que un traslado, aunque sea temporal, supone un gran esfuerzo e incluso un agravio. «Mucha de esta gente preferiría acabar su vida aquí, en la que ha sido su casa de toda la vida; por ello pedimos que se valore este esfuerzo y se compense costeándoles unas condiciones de vida dignas y homologables a las que tienen ahora», apostilló. «Yo, aunque estoy operado de la columna, todavía tengo movilidad, pero hay gente que no tiene tanta suerte», añadía José Manzanera, otro residente.
Noticia Relacionada
«Si de mí depende, por 600 euros al mes yo no me muevo». Así de tajante se mostraba Susana López. Ante el sonido de campanas, ella ya ha mirado alternativas para mudarse pero, por ejemplo, por los pisos en la zona nueva de expansión de Barriomar piden alquileres superiores a los 700 euros. «Esto será de un día para otro; no podemos empezar a sacar los muebles, habrá que comprar cosas y seguir pagando impuestos de nuestra vivienda, que, además, habíamos reformado», precisa.
Su familia está compuesta por cinco miembros, con lo que necesita un inmueble amplio y, a ser posible, cercano a donde vive ahora. «El instituto de mi hija está aquí: su vida, sus amigos, su entorno… no se la puede sacar así, de pronto, sin contar que tendremos que ejercer de taxistas para todo», concluye, sabiendo que es posible que nunca vuelva a esa casa. «Cuando rehaces tu vida, es muy difícil dar marcha atrás y muchos de los que salgamos de aquí, venderemos después», añade. El Ministerio tiene en su mano ejecutar las expropiaciones, pero ahora deberá decidir cómo quiere que sea la relación con los vecinos afectados. Seis euros, seis. El primer paso será una comunicación formal.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.