Un estudio revela que las fugas están detrás de la mitad de desapariciones de menores en la Región
La Fundación Anar prestó su ayuda el pasado año en 18 casos de adolescentes en paradero desconocido en la Comunidad
La mitad de las desapariciones de menores de edad en la Región se deben a intentos de fuga protagonizados por los propios niños o adolescentes. Esta es una de las conclusiones del informe que presentó este miércoles la Fundación Anar, que se encuentra detrás del número 11600, activo en toda la Unión Europea. La fundación ha elaborado este estudio en base a las llamadas, chats y correos electrónicos de ayuda recibidos el pasado año por parte de menores y sus familias.
La organización ayudó el pasado año en todo el país a 1.171 menores. En la Región la fundación Anar actuó en 18 casos, según los datos que los responsables de la entidad pusieron encima de la mesa durante la presentación del informe con motivo del día Internacional de Menores de Edad Desaparecidos.
En el 57,6% de los casos atendidos por Anar, el motivo de la desaparición era una fuga, seguida por las expulsiones del hogar (23,7%); el secuestro parental (12,4%) y la pérdida o accidente (3,8%). Asimismo, tal y como explicaron desde la organización, en un 0,6% de los casos se trataba de migrantes no acompañados y en el 1,9%, era un secuestro por parte de terceros con fines criminales.
La tristeza, el maltrato psicológico, el miedo, la conducta suicida y la ansiedad son los principales problemas que padecen los niños, niñas y adolescentes desaparecidos, según el informe. Entre los problemas presentes en su entorno, el estudio destaca la violencia de género, las adicciones, el maltrato psicológico y el maltrato físico. Además, señala que como consecuencia de la desaparición, las familias sufren miedo, ansiedad, tristeza, adicciones o conducta suicida, entre otros.
