Escepticismo y críticas entre los comerciantes de la Región de Murcia
La obligatoriedad de cierres automáticos en las puertas, la subida a 27ºC del aire acondicionado y el apagado de los escaparates no convencen a los vendedores
Rubén García Bastida y J MARTÍNEZ
Miércoles, 3 de agosto 2022, 00:23
Basta iniciar el recorrido por algunas de las calles de mayor vocación comercial de las ciudades de la Región para recibir varias bocanadas de ... aire frío de los establecimientos que intentan atraer a los clientes con el reclamo del bienestar térmico. Una situación a la que las nuevas medidas pretenden poner coto. En Murcia, con 36 grados y un sol que vacía las aceras del centro, las puertas abiertas se suceden invitando al paseante a tomar un respiro, desde perfumerías y tiendas de cosmética a establecimientos de ropa, mercerías, comercios de electrónica, de carcasas de móviles. También abundan los bares con barras al exterior o grandes puertas que también se verán afectados por el real decreto.
En la calle Jabonerías, Begoña Aroca, que regenta una tienda de moda y complementos, lamenta la necesidad de hacer una inversión en mecanismos de cierre, que ahora mismo no tiene «por una medida de unos meses». Pero lo que peor cree que sentará a tiendas como la suya es la subida de la temperatura a 27 grados. «¿Quién va a querer probarse ropa?», dice. «Esto va a hacer que la gente no gaste, que no salga».
En su negocio de tejidos de la calle Sociedad, Antonio Gómez duda de que el plan logre grandes ahorros. «Los comerciantes ya hacemos todo lo posible para gastar menos por una cuestión financiera. Yo refresco la tienda y luego cierro la puerta y quito el aire mientras se puede, he puesto luces led. No creo que esto vaya a suponer demasiado», afirma.
Entre los comerciantes de Cartagena, también cunde el escepticismo. Las mayores críticas a las propuestas surgen al hablar del apagado de las luces de los escaparates a las diez de la noche. «Nos va a repercutir negativamente. En verano la gente sale a dar un paseo hasta tarde y si ve un escaparate que le gusta, vuelve al día siguiente a comprar. Ahora eso no va pasar», explica María Celdrán, dependienta en una tienda de ropa en la calle Santa Florentina, en el casco histórico. La presidenta de la Asociación de Comerciantes Platería y Trapería de Murcia, Marisa Cano, también pone el acento en este apartado: «No me gusta. Las ciudades se quedan muertas sin los escaparates. La luz de los comercios es muy importante para dar vida y seguridad a las calles».
Otro asunto espinoso y que genera dudas es cómo cumplirán la ley quienes no tienen puertas. «Hay que desembolsar una cantidad considerable de dinero además de necesitar tiempo para realizar la obra», expone Gelen Vega, encargada en un establecimiento de productos de telefonía en la calle Mayor de Cartagena.
Murcia ve «acertado el plan»; Cartagena, «precipitado»
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Murcia mostró ayer su adhesión al plan de medidas de ahorro, que considera «acertado», ya que «permitirá ahorrar energía y usarla de forma más eficiente, consiguiendo asimismo disminuir las emisiones de CO2 a la atmósfera». Fuentes de La Glorieta señalaron, además, que pronto pondrán en marcha su propia estrategia de reducción de consumo eléctrico, con la que esperan ahorrar como mínimo 750.000 euros en cinco años, tal como se incluye en el Plan de Saneamiento Financiero aprobado hace unas semanas. Desde el Consistorio de Cartagena, en cambio, señalaron que estas decisiones son «precipitadas», y recordaron que se tomaron en un Consejo de Ministros extraordinario. El Ayuntamiento no quiso valorar con mayor profundidad el plan hasta que no pueda analizarlo en profundidad, aunque recordó que a nivel municipal ya han llevado a cabo medidas como el cierre de la actividad de tarde en el edificio de San Miguel o el plan de climatización en espacios públicos a 26 grados. También indicó que la iluminación de algunas fuentes tiene impacto en la seguridad vial.
Con información de Rubén García y José Alberto González
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