Diego Conesa: «En 2017, las encuestas nos daban 9 diputados y sacamos 17 en 2019»

-Con 'Volver a ganar' apela a la victoria de las autonómicas en 2019, ¿está pensando también en ser el candidato para 2027?

-Volver a ganar es un sentimiento, es una ilusión y es una determinación. En un primer paso para trasladar a la militancia que ahora lo que se gana es el partido, pero que el PSOE es un instrumento al servicio de la región de Murcia y la aspiración tiene que ser siempre la de ganar y formar esa alternativa necesaria por higiene democrática 30 años después.

-¿Hablaremos de la candidatura dentro de dos años?

-La ambición es ir por todas en 2027, en cada uno de los 45 municipios. Es un proyecto en el que hay que trazar una estrategia para cada uno de ellos, viendo y escuchando y atendiendo a los compañeros . En los grandes municipios, contaremos con una estrategia diferenciada. Formar cuadros con el plan de formación con la universidad pública que se aprobó a finales del 2021, que hay que poner en marcha ya de una vez, y trabajar en esa línea: acercarse mucho a las agrupaciones, marcar esa estrategia, luego comarcalizar como tal lo que son los proyectos y finalmente ofrecer uno para la Región.

-Desde su marcha, el escenario ha cambiado mucho. ¿Se ve capaz de volver a conseguir de nuevo un PSOE ganador?

-El escenario es muy difícil. Es evidente que eran muchas más las alcaldías y compañeros que estaban gobernando en muchos más municipios de la Región de Murcia en 2017 que en 2019. En 2017 fui el ganador de las primarias del PSRM y recuerdo que, en la primera encuesta, pocos meses después, nos daba nueve diputados en la Asamblea. Finalmente sacamos 17 y se ganaron las elecciones 28 años después.

-¿Por qué cree que le necesita el PSOE?

-Creo firmemente con la experiencia, con la madurez, con el aprendizaje y el análisis de los errores, que la organización lo que necesita ahora es mucho mimo, mucho cariño, mucha presencia en los territorios. Muchas tardes de ir a cada municipio, a cada pedanía, a cada barrio, visitar espacios comunes, personas, organizaciones, centros de salud, centros de mayores, empresas... Luego, hablar mucho y compartir opiniones e incluso frustraciones con los compañeros. Y finalmente, con los militantes: escuchar, ver un poco, empujar, ilusionar, hacer equipos con todos aquellos compañeros que tengan inquietudes. Y eso ahora mismo necesita de mucho tiempo y mucha dedicación a la Secretaría General. Hasta 2027, no tendría ningún cargo institucional y estaría en esa labor.

-Cuando usted dejó la Secretaría General , se dijo que no supo gestionar o encajar el fracaso de la moción de censura con Ciudadanos. ¿Ha tenido la ocasión de reflexionar estos tres años? ¿Es usted el mismo?

-El proceso de madurez en estos tres años, en perspectiva, ha sido de un aprendizaje y una corteza muy superior a la de los seis años y medio que tuve actividad pública intensa. A mí me pesó como una losa esa moción de censura como la segunda desilusión que tuvo la militancia y la sociedad progresista de la Región, después de la esperanza en 2019. Nunca concebí que una persona sería capaz de firmar un documento así y ser comprado por un gobierno autonómico, invistiéndose de manera inmediata como consejero. Esa sinvergonzonería no cabía en mi cabeza. Ese pesar y desánimo de la militancia lo hice mío. Aunque luego pude percibir cuando pasaron los meses que lo que habían valorado los militantes era el resultado y la victoria en 2019, y luego el esfuerzo y mi compromiso y mis renuncias políticas y personales.

-¿Cree que unas primarias con varios candidatos puede suponer un reto para romper el partido o es de los que mantiene esa línea de que la democracia interna es sala y posibilidad?

-Mi obsesión en este proceso, y así se lo estoy trasladando a todos los secretarios generales, es que no genere ningún tipo de grietas en las agrupaciones locales. Tengo la experiencia de un proceso en 2017. Y por mi parte el compromiso total y absoluto, así trasladado a la dirección federal, a la dirección regional y a todos los secretarios generales de todas las agrupaciones, de que este proceso sea un acicate y revulsivo a los compañeros que decidan y contrasten sobre proyectos de partido con propuestas de trabajo y de proyectos. Y que luego los militantes soberanamente decidan.

-¿Y qué apoyos tiene para sentir que pueda aspirar a la Secretaría General?

-Hay agua en la piscina.

-¿Qué le ha dicho Ferraz?

-Se lo comuniqué a nuestro secretario general, Pedro Sánchez. Se lo comuniqué también a la presidenta, Cristina Narbona. Y se lo comuniqué a nuestro secretario de organización, Santos Cerdán, poniéndome a disposición para cualquier cosa que él considerara oportuna y en una actitud correctísima de que llevaremos el mejor proceso posible.

-¿Eso es todo lo que le transmitieron? ¿Puede ser usted el candidato de Ferraz?

-Creo que todos somos candidatos de la militancia, al final es quien decide. Tenemos a nuestro secretario general y presidente, y líder indiscutido del partido, que lo es gracias a la militancia. Esa fuerza y ese respaldo es el que le otorga la libertad y la fuerza para tomar decisiones en favor de la mayoría social de España. Y ahora es la militancia la que, entre cuatro compañeros, tomará esa decisión. Con la madurez que ya tenemos como organización seguro que los compañeros que no ganen este proceso de primarias se pondrán a disposición de quien pueda resultar ganador al día siguiente.

-¿Cómo es su relación con José Vélez? ¿Cómo valora su gestión al frente del partido?

-Ha sido un contexto muy difícil para él en el que le ha tocado, es muy difícil, dificilísimo. Lo ha intentado con la forma y con la concepción del partido como tal que tiene él. Y respeto su labor como respeto también la labor de los anteriores secretarios generales.

-Hay destacados dirigentes socialistas que han pedido o que les han transmitido tanto a usted como a Inmaculada Sánchez Roca que haya un acercamiento para que los dos se integren en un proyecto común. ¿Cómo vería esa opción, esa alternativa?

-Parece que en esta primera fase, antes de los avales no ha sido posible. Vamos a ver cómo resulta. Mi relación con todos los compañeros es fluida. Es una decisión personal la de presentarse y afrontar este proceso para la recogida de avales. Y cuando termine este momento, seguro que sí, espero que podamos hablar.

-Sobre la recogida de avales, el calendario muy apretado con muchas flotas además de por medio. No sé si esto es normal o si cree que forma parte de algún tipo de movimiento para beneficiar al aparato o a un candidato.

-No, el calendario estaba preestablecido. Sabíamos que los periodos eran muy ajustados. Se ha aprobado por el Comité regional, y es el que hemos de respetar y asumir. La pena, lo que lamento, es que con este tiempo no podré visitar todas las agrupaciones como sería mi voluntad.

-Vuelve en un escenario político, tres años después, en el que el Gobierno regional se ve abocado a una prórroga presupuestaria y parece que no quiere negociar con el PSOE. ¿Cómo ve la actual coyuntura? ¿Cree que se activará el botón de la repetición electoral?

-No creo que vaya a existir repetición electoral. Hay que recordar que el señor López Miras va a cumplir ocho años de presidente y habría que analizar en estos ocho años qué es lo que se ha hecho y cómo está la región. Respaldo el ofrecimiento que en este caso ha hecho el secretario general para que el PP se siente con el PSOE para sacar adelante unos Presupuestos de la Región ante una situación de parálisis y de chantaje de Vox con medidas ilegales. La Comunidad está afrontando unos desafíos enormes y estamos viendo cómo pasan desgraciadamente muchos trenes por esa parálisis. Respaldo como tal esa decisión y, en caso de ser secretario general, en esa cuestión en concreto iría en la misma línea.