'Cocaína rosa', la droga impostora
Los jóvenes trapichean a través de las redes con esta sustancia, de alto potencial adictivo, que se mueve ya en discotecas y 'raves' de la Región
ALICIA NEGRE
MURCIA.
Lunes, 19 de diciembre 2022, 02:26
Nombres tiene muchos –tusi, 2CB, tucibí, venus, Nexus o Erox–, pero su color es único y no pasa desapercibido. La 'cocaína rosa', considerada durante ... un tiempo la droga de la 'jet set', parece haber bajado de su escalón y ha pasado a engrosar el catálogo de los trapicheos. Según explica el teniente Antonio Corbalán, jefe del grupo antidroga de la Policía Judicial de la Guardia Civil, esta sustancia, que de cocaína solo tiene el nombre, ya se mueve en la noche murciana, principalmente en locales de música electrónica y 'raves', aunque lo hace aún con cierta timidez.
«En la Región, hasta la fecha no se ha detectado una presencia significativa de esta sustancia, habiéndose producido alguna pequeña incautación», explica este especialista del Instituto Armado. Una visión que comparten también desde la Policía Nacional. «Se ha detectado que hay cierto consumo por las actas que levantan las distintas unidades de Seguridad Ciudadana y por intervenciones que se han realizado con algún detenido, siempre en zonas de ocio nocturno», remarca el jefe del grupo de Estupefacientes de la brigada provincial de Policía Judicial de este cuerpo –que prefiere no desvelar su nombre por cuestiones de seguridad–. Remarca, no obstante, que su incidencia aún queda muy alejada de la de otras sustancias, como la marihuana o la tradicional cocaína.
Sus efectos, advierten los expertos, pueden durar hasta 6 horas e incluyen alucinaciones e incluso episodios de pánico
'Bombas' en Instagram
Esta droga, sin embargo, ha encontrado un aliado, un altavoz impagable: las redes sociales. Los agentes especializados en la lucha contra el 'narco' han comenzado a detectar vídeos en Instagram –de los que desaparecen a las 24 horas– en los que jóvenes se dejan ver con la nariz rosa tras haber esnifado la 'cocaína' o mostrado la sustancia a potenciales clientes. «La globalización que han permitido las redes de comunicación social ha resultado un canal perfecto para fomentar todo tipo de transacciones, legales o ilegales, circunstancia a la que esta sustancia no es ajena», incide el teniente Corbalán.
El jefe del grupo de estupefacientes de la Policía Nacional reconoce también que esta droga se está «popularizando» en las redes sociales. Advierte, no obstante, de que en estos canales también se lanza información sobre los efectos de este estupefaciente que son erróneos y que esconden los riesgos que realmente entraña.
La primera trampa de esta droga radica, precisamente, en su nombre. No tiene nada de cocaína. La única similitud con esa sustancia es que habitualmente se esnifa. El teniente Corbalán explica que la composición actual de la 'cocaína rosa' está más relacionada con el LSD y la metanfetamina (MDMA). Este experto del Instituto Armado hace hincapié en los riesgos de los efectos de esta droga, que pueden durar entre 5 y 6 horas y que incluyen alucinaciones visuales, efectos psicodélicos y hasta episodios de pánico. Advierte, además, de que su potencial adictivo puede ser mayor que el de la cocaína, dado que la metanfetamina que suele contener genera gran dependencia física y psíquica.
Esta sustancia se está «popularizando» con rapidez a través de las redes sociales que, a veces, informan erróneamente sobre sus efectos
La droga de los pijos
La 'cocaína rosa' comenzó a dar sus pasos, además, rodeada de un halo de cierto elitismo: era la droga de los pijos, de la 'jet set'. Una imagen que los expertos achacan al «marketing» y que es una nueva trampa de esta sustancia. «En principio, se a relacionó con determinados ambientes de fiesta como una droga exclusiva y moderna cuando en realidad se sintetizó por primera vez en los años 70», subraya Corbalán. La Policía Nacional explica, sin embargo, que las últimas aprehensiones de esta droga permiten intuir que se ha bajado del escalón. Aunque en un primer momento se vinculó a clientes con la billetera llena, el precio, al parecer, ha bajado y la sustancia ha acabado por generalizarse, llegando a las clases medias. La Guardia Civil, en base a los datos facilitados por la Oficina Central de Estupefacientes, estima que su valoración está en torno a 29 euros por gramo. La Policía Nacional, sin embargo, apunta a que su coste se asimila al de la cocaína, a unos 60 euros el gramo.
Recientemente, la Policía ha culminado en Málaga una operación en la que se ha intervenido uno de los mayores alijos de 'cocaína rosa' –7,5 kilos– incautados hasta la fecha en el país. El golpe solo se ve superado por los 13,25 kilos que se incautaron en Ibiza en agosto y los 11 kilos intervenidos en Valencia en marzo de 2021. Por el momento, sin embargo, las incautaciones de esta droga en la comunidad se suceden con cuentagotas y se suman más por gramos que por kilos. El pasado verano la Policía desmanteló en Alcantarilla un laboratorio capaz de producir esta sustancia, pero apenas se detectó un gramo de 'cocaína rosa' entre otras muchas sustancias. En febrero del año pasado, unos agentes de la Policía Local de San Javier le dieron el alto a dos jóvenes que iban en coche y les encontraron cuatro gramos.
«Lo venden a precio de oro, pero es un popurrí de otras drogas»
Isabel Peñalver Garcerán, psiquiatra de la unidad de desintoxicación hospitalaria del hospital Reina Sofía de Murcia, explica que esta sustancia aún no se está dejando notar en las urgencias y en las unidades de tratamiento de los hospitales. «Normalmente, las sustancias adictivas tardan en desarrollar esa dependencia y los problemas físicos, psíquicos y a veces legales que conlleva el consumo», explica. «A veces son años». Esta especialista da por hecho, sin embargo, que esta droga ya está en la Región y alerta de sus riesgos.
Peñalver explica que, aunque la 'cocaína rosa' es un tipo de feniletilamina, un derivado anfetamínico, lo que se vende en la calle tiene poco que ver con esa sustancia. «Es un popurrí de otros productos que pueden semejar lo que hace esa feniletilamina. Son la ketamina, el éxtasis y la cafeína», relata. «Lo venden a precio de oro, siendo una mezcla de productos muchísimo más económicos».
Esta especialista advierte, además, del «marketing» que rodea e impulsa el consumo de esta droga. «Mucha gente piensa 'si esta es la droga que toma la élite, ¿por qué yo no?'».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión