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Vuelven los recorridos por San Esteban: «Debería conocerse más porque forma parte de nuestra herencia»
Los dos primeros visitantes del yacimiento arqueológico de Murcia, abierto de lunes a viernes, realizan el recorrido gratuito acompañados por la codirectora de las excavaciones, quien explica paso a paso los trabajos
Carmen Dolores y Pedro estrenaron ayer la nueva campaña de visitas guiadas en el yacimiento de San Esteban, tres semanas después de que los arqueólogos de la Universidad de Murcia (UMU) reiniciaran las excavaciones. Una campaña de recorridos gratuitos que el Ayuntamiento de Murcia ha retomado y que se prolongará hasta el 30 de junio, de lunes a viernes.
«Esto es una maravilla, me ha encantado», destacó Carmen tras la visita de casi una hora, en la que Alicia Hernández, codirectora de la excavación, hizo de maestra de ceremonias de esta primera cita, explicando paso por paso, ayudada por carteles y fotografías de todo el yacimiento tomadas a vista de pájaro por drones, lo que se había hecho hasta ahora y lo que esta previsto culminar hasta principios de julio.
«Creo que precisa de más divulgación para que se conozca mejor este conjunto arqueológico que forma parte de nosotros; es nuestra herencia», añade la vecina de Murcia que, además, ha estudiado Arqueología.
Tanto Carmen como Pedro, extrañados de ser los únicos que se habían apuntado a esta primera visita, consideran necesario ampliar el horario, y ofrecerlas también por las tardes. «La verdad es que se ha hecho corta, todo está muy bien explicado».
Alicia estuvo acompañada en el recorrido por la recién graduada en Historia Irene González Oliva, ya que su formación, además de excavar en el yacimiento, incluye explicar los descubrimiento a los visitantes.
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Horario Las visitas en grupos de un máximo de 35 personas se realizan de lunes a viernes a partir de las 10.30 horas.
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Duración El recorrido es de unos 45 minutos e incluye tanto las zonas ya excavadas como las que están en proceso.
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Inscripción Para apuntarse a las visitas hay que rellenar el formulario disponible en el enlace eventix.shop/7n3um426.
El punto de partida del itinerario es un cartel donde se reciben las nociones generales del yacimiento del también conocido como el arrabal de la Arrixaca, barrio pegado a la zona norte de la medina en el que habitó población árabe murciana entre los siglos XII y XIII.
Los restos aparecieron cuando se iba a construir un parking subterráneo, y para los que, «gracias a la presión vecinal», se consiguió la declaración de Bien de Interés Cultural, allá por la primera década del año 2000, recuerda la codirectora de los trabajos, cuya primera excavación tuvo lugar en 2018.
La siguiente parada de la visita, una vez tomada la denominada 'calle Ñ' o vía principal del arrabal, es el sector nuevo abierto este año y que corresponde a una «unidad doméstica muy interesante por la disposición del edificio», apunta otra de las arqueólogas. Isabel, desde ese punto, que está en un trabajo inicial. «Pablo y Adrián están excavando en la zona que parece un patio, y delante de ellos, pegados a la 'calle N', hay espacios que podrían ser tiendas o habitaciones de la vivienda principal; es lo que vamos a tratar de averiguar».
Desde allí, los visitantes siguen su camino hacia el nombrado 'Recinto 2', de 300 metros cuadrados, una gran propiedad a la que se accedía a través del patio, desde el que parten el resto de las dependencias de la casa. «De las zonas ya excavadas hemos recuperado restos de cerámicas, vidrios y metales», comenta Hernández, quien apunta que ahora se trabaja en el área sur y este.
Siguiendo el camino, se llega al segundo gran recinto (el 1), abierto en la campaña de 2018, que es el de mayores dimensiones y colinda, con un muro de separación, con el anterior. De 410 m2, es la que más tabiques tiene, así como canalizaciones, lo que ha llevado a pensar a los arqueólogos que se trata de una funduq o posada que servía de alojamiento y almacenaje, y posiblemente de lugar de venta al por mayor, explica Hernández.
Continuando por la calle 'Ñ' se llega al cementerio o maqbara, última parte del recorrido. En esta zona se lleva trabajando desde 2018 extrayendo los cuerpos, con ayuda de antropólogos. «Hasta el momento hemos recuperado 25 cuerpos, todos enterrados de medio lado y mirando a La Meca», comenta María Haber, antropóloga física de la UMU, quien detalla que de posteriores análisis de los huesos se puede conocer la edad, el sexo e incluso la dieta; su procedencia (color del pelo, de los ojos y de la piel) y la posible causa de la muerte.