Vecinos de pedanías de Murcia exigen abordar ya la falta de aceras en carriles de huerta con tráfico elevado

Uno de los ejemplos más paradigmáticos en relación con esta problemática es la situación que se vive en el sector oeste de la histórica Senda de Granada. «Algunos se creen que esto es el circuito del Jarama y circulan a toda pastilla, sin darse cuenta de que puede salir cualquier persona de una bocacalle y llevársela por delante», comentaba ayer María, mientras desafiaba al miedo empujando sobre la calzada su carrito de la compra. Como buena parte de los residentes de la zona, suele enfilar este vial para acudir a los supermercados que se encuentran en el entorno de Mariano Rojas.

Esta vía cambió su naturaleza tranquila hace unos años con los desarrollos urbanísticos del Portón de los Jerónimos y, principalmente, Joven Futura, con 1.400 viviendas y 3.000 nuevos habitantes. Este crecimiento provisional no implicó, sin embargo, la construcción de nuevas vías de acceso, ni una redimensión o reordenación de las existentes, de manera que por este tramo de Senda de Granada, que muchos conductores utilizan por comodidad y para evitar semáforos, circulan, según datos de la asociación de vecinos, 14 coches por minuto en las horas punta y en doble sentido. Este aforo genera así una situación de peligro advertida, incluso, en un informe del Servicio de Extinción de Incendios municipal de 2017.

La entidad vecinal lleva luchando más de un lustro, con el apoyo de diversas juntas municipales, para que se dé solución al problema, pero, según explica su presidente, Ángel Tortosa, están cansados de que las buenas palabras no se traduzcan en decisiones efectivas. Hace poco más de un mes, los vecinos volvieron a reunirse con diversos responsables municipales, incluidos los de Urbanismo y Fomento, y les presentaron una propuesta técnica «asumible», con un coste estimado de 220.000 euros, que propone crear una vía de servicio, paralela al acceso a la autovía A30, que canalice el tráfico de entrada, manteniendo el de salida, con un solo sentido, por Senda de Granada hasta la avenida Doctor Pedro Guillén. Inciden desde la asociación en que la actuación se haría casi al completo sobre terrenos públicos, a excepción de unos cuantos metros cuadrados de huertos que deberían expropiarse. Preguntadas por LA VERDAD, fuentes municipales no se pronunciaron al respecto.

Una problemática similar se presenta en la calle Cuatro Caminos, de Zarandona. Paralela a la carretera de Alicante y llena de naves industriales –entre ellas, una de la concesionaria del servicio de limpieza viaria, PreZero–, absorbe un porcentaje nada despreciable de los vehículos que circulan entre la avenida Reino de Murcia y La Flota, ya que permite a los conductores ahorrarse algún que otro semáforo. Aquí, a la falta de aceras se suma la presencia de numerosos coches aparcados en los márgenes de la calzada, cuando no directamente abandonados. «Salir andando por aquí es una odisea; un día va a ocurrir una desgracia», clama Francisco Ayuso, de 77 años, que lleva casi toda una vida viviendo en esta vía.

El riesgo no es aquí solo para los vecinos del entorno, ya que esta calle es utilizada a diario por escolares de Zarandona que acuden a clase en el Colegio Concertado La Flota. De ello da fe el presidente de la Junta Municipal de esta pedanía, Francisco José Esteban, que apuesta también, en este caso, por dejar la vía de un solo sentido, en dirección hacia el casco urbano, lo que permitiría construir las citadas aceras. «Ya de por sí, la salida a la rotonda de Homenaje a los Poetas, que está en cuesta, es peligrosa ante la escasa visibilidad que presenta», explica Esteban, confiado en que se adopte esta decisión cuando se finalice la prolongación de la avenida de la Marina Española. Fuentes municipales aseguran que ya se está trabajando en un estudio previo para reordenar el tráfico de la calle en este sentido, lo que ofrece gran complejidad por la presencia de las instalaciones industriales. «La actuación no se realizará sin el consenso y la aprobación mayoritaria de los vecinos», concluyen.

Por otra parte, los vecinos de Los Dolores llevan décadas pidiéndola extensión de las aceras de la calle Mayor hasta el puente de Tiñosa, sin respuesta alguna, primero, por parte de la Comunidad y, después, del Consistorio, cuando este asumió su titularidad. «Y si fuera solo este caso..,. no tenemos tampoco en carriles muy transitados como el de la Enera y de Torres de los Leales y diría que no hay ni siquiera un solo metro de arcenes transitables en la avenida de la Región Murciana, que nos conecta con Beniaján», clama Ismael Gálvez, alcalde pedáneo. Más suerte han tenido los residentes de Algezares y Santo Ángel, que vieron como este verano se daba luz verde a la adquisición de los terrenos necesarios para dar seguridad al tramo de 300 metros de asfalto que une ambas pedanías.