El pequeño comercio pide que el inicio de las rebajas de verano se retrase un mes

El pequeño comercio quiere mirar al futuro con optimismo y dejar atrás cuanto antes las complicaciones que ha traído para el sector la crisis sanitaria motivada por la expansión del coronavirus.

Una de las propuestas que mayor consenso ha conseguido en el sector es pedir que el inicio de la campaña veraniega de rebajas se retrase un mes. La Federación Murcia Área Comercial ha remitido una propuesta por escrito en este sentido a la Dirección General de Comercio e Innovación Empresarial. Al frente de este órgano se sitúa en la actualidad María José Ros Olivo, después de la última reestructuración que se ha producido en la Consejería de Empresa y que ha llevado a Carolina Espinosa –anterior directora de Comercio– a ocupar el área de Consumo y Artesanía.

«Estamos a expensas de mantener un primer contacto con la nueva directora general para exponerle nuestra postura, pero la idea ya se la hemos remitido por escrito y apunta en la dirección de retrasar un mes el comienzo de las rebajas de verano», reconoció ayer a LA VERDAD el presidente de Murcia Área Comercial, Santiago Vera.

La idea del pequeño comercio sitúa en agosto, en lugar de julio, como es habitual, el inicio de las rebajas. El periodo de los descuentos, según la propuesta que ha planteado el sector, abarcaría también el mes de septiembre.

«Este verano va a ser distinto. La situación sanitaria puede provocar que en agosto no se vaya tanta gente de la ciudad y se pueden desarrollar acciones para que el comercio de proximidad incremente sus ventas», argumentó Santiago Vera.

Uno de los aspectos que los dueños de los negocios quieren evitar a toda costa es que la vuelta a la normalidad, una vez den su consentimiento las autoridades sanitarias conforme evolucione la pandemia de la Covid-19, coincida prácticamente con los preparativos para el comienzo de las rebajas. «Nos parece pertinente para este año tener un mayor margen de maniobra», apuntan desde la federación.

Muchos comerciantes recuerdan que «no hay que olvidar que la esencia de las rebajas es liquidar el 'stock' sobrante, pero al no tener actividad desde el 14 de marzo, hay mucho material almacenado al que se le debe intentar dar salida de forma ordenada y no con el frenesí que suponen las rebajas en muchas ocasiones». La vuelta a la actividad cuanto antes es otra de las demandas que el pequeño comercio ha trasladado.

Algunas asociaciones señalan el 11 de mayo como la fecha ideal para retomar el trabajo en sus tiendas. En cualquier caso, consideran que los negocios de barrio deben abrir dos semanas antes que las grandes superficies.

«Es meramente una cuestión de sentido común. En el pequeño comercio no hay aglomeraciones. Se atiende a la clientela de uno en uno, salvo en veces muy contadas, y eso permite establecer de forma sencilla un control en los accesos. Creemos que desde el punto de vista sanitario nuestra propuesta tiene lógica», expuso Santiago Vera. De igual forma, el sector ha pedido a las administraciones que, con independencia de la fecha que se termine determinando para la vuelta a la actividad en sus negocios, se garantice a las tiendas el suministro del material necesario para el correcto desarrollo de su trabajo. «Necesitamos guantes, mascarillas y geles y estamos dispuestos a pagarlos, pero es necesario que nos aseguren que los tendremos a nuestro alcance», precisan. Una de las fórmulas que se encuentran en estudio es que sean las juntas municipales y de distrito las que se encarguen del reparto del material.

Esta batería de propuestas las han secundado desde las asociaciones de comerciantes de Platería y Trapería, Triángulo de Murcia, Santa Eulalia, El Carmen, Infante Juan Manuel, San Antón, Vistalegre, La Flota, Zarandona, Beniaján, Alquerías, Sangonera la Verde, Cabezo de Torres, Puente Tocinos, Llano de Brujas, El Palmar, La Alberca, Monteagudo, El Esparragal, Cieza, Santomera, Bullas, Fortuna y Molina. Por su parte, desde las grandes superficies, como El Corte Inglés, ayer recordaron que «las rebajas están liberalizadas desde 2012 y cada establecimiento es libre de elegir el periodo que prefiere».