Huerta Viva denuncia la proliferación en Murcia de construcciones en suelo protegido
El colectivo exige el cumplimiento de la «disciplina urbanística» para evitar obras ilegales en zonas como Puebla de Soto y Rincón de Beniscornia
Rincón de Seca, La Ñora, Rincón de Beniscornia, Puebla de Soto, La Raya y Monteagudo son las seis pedanías en la que ha puesto ... el foco la Asociación para la Recuperación de la Huerta de Murcia, Huerta Viva, para denunciar la proliferación de construcciones ilegales en suelo protegido a través de un informe que es «un claro reflejo de lo que está sucediendo en otros enclaves de alto interés del municipio». En el caso de las zonas mencionadas, la ubicación junto al río o en pleno corazón de la huerta hace que se trate de espacios catalogados con la máxima protección, según alertan desde el colectivo conservacionista. «Los suelos calificados como NR en el Plan General son rincones y cabecera del Segura y otros espacios de alto interés», indican.
«Llevamos años denunciando la imparable degradación que viene sufriendo la huerta de Murcia sin que hasta el momento el Ayuntamiento haya puesto en marcha ni una sola medida eficaz para frenar este deterioro». Para Huerta Viva, «no se entiende esa inacción, teniendo en cuenta que se trata de un espacio agrario histórico y del paisaje que forma parte de la identidad de Murcia, además de contribuir directamente en el bienestar de la ciudad al regular el microclima, mejorar la calidad del aire y garantizar la soberanía alimentaria», destaca el portavoz de la asociación, José Antonio Moreno Micol.
«Llevamos años advirtiendo de la imparable degradación», lamenta el portavoz de la asociación
Echando la vista atrás, Moreno Micol recuerda que «en el año 2020, gracias a la presión de diversos colectivos, el Ayuntamiento encargó a la Universidad Politécnica de Cartagena un diagnóstico sobre la situación actual de la huerta con el objetivo de iniciar una revisión del Plan General de Ordenación Urbana, al considerarse una de las principales causas de degradación y desaparición de la huerta».
Sin embargo, lamentan que «aunque el diagnóstico se entregó en 2022, no hemos sabido nada de las conclusiones ni se ha utilizado para emprender medidas que ayuden a corregir el deterioro». En este sentido, desde la asociación exigen a la Administración local «disciplina urbanística» y señalan que «hay una política de total laxitud con estas construcciones que se hacen de forma ilegal en suelos especialmente protegidos, a pesar de ser un delito urbanístico».
«Perseguimos estas prácticas», mantienen desde la Concejalía, que el año pasado abrió 185 expedientes
A lo que añadieron que «en el mejor de los casos, los propietarios pagan una sanción que viene muy bien a las arcas municipales, sin ninguna otra consecuencia. Se construyen viviendas o naves industriales contando de antemano lo que el Ayuntamiento va a cobrar de multa. Una mala práctica a la que nadie quiere poner freno».
Pendientes de una reunión
Para abordar el tema e intentar atajar la situación, Huerta Viva ha pedido un encuentro con el concejal de Planificación Urbanística, Huerta y Medio Ambiente, Antonio Navarro. «Hace un par de semanas solicitamos oficialmente una reunión para presentarle el informe que hemos realizado sobre las construcciones ilegales detectadas».
Desde el Ayuntamiento de Murcia aseguraron que durante el año pasado se abrieron 185 expedientes urbanísticos por este tipo de prácticas, que «el Consistorio persigue».
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