Guadalupe, Churra y la carretera de El Palmar tendrán tres disuasorios para aliviar el tráfico

El vicealcalde y concejal de Fomento, Contratación e Infraestructuras, Mario Gómez, explicó a LA VERDAD que la idea siempre ha sido encontrar solares públicos que fueran «cómodos y accesibles, así como útiles» a la hora de dejar el coche a la entrada del casco urbano, con conexiones con medios de transporte público.

«Estamos inmersos en la redacción de los informes técnicos y jurídicos que den soporte al proyecto», indicó Gómez, por lo que dijo que era pronto para especificar el número de plazas concreto en cada uno.

Comentó que además de los nuevos disuasorio en terrenos públicos municipales, se quiere negociar con los propietarios el uso de otros solares privados, sobre todo en la zona sur (junto a la Ronda), «para aparcar temporalmente, mientras duren las obras de los carriles bici y bus segregados». El Ayuntamiento se encargaría de adecuarlos, sin necesidad de llegar a hormigonar, con la extensión en el terreno de zahorra o gravilla, con lo que se evitarían los charcos y el barro cuando llueve.

El Consistorio tendría que echar mano de los terrenos privamos porque, debido a que durante muchos años en la zona sur del municipio no se han desarrollados los planes parciales para su urbanización, no hay suelo público disponible, añadió Gómez.

El vicealcalde recordó que en algún caso ya se están utilizando como aparcamiento de manera habitual por los vecinos.

La idea del Ayuntamiento era ofertar en este tipo de nuevas instalaciones regladas, que gestionaría Aparcamurcia (Urbamusa), un total de 2.400 plazas, la mayoría en la zona sur (1.500).

Uno de los nuevos disuasorios que se contemplan, y con el que también se podría acabar con el problema de la inundación y encharcamiento del solar, es el ubicado en la pedanía de Guadalupe. Está situado en el último tramo de la Costera Norte (ahora denominada avenida Ibn Mardanis, nombre del legendario Rey Lobo), «que no parece que por ahora, y en muchos años, se vaya a acabar», apuntó el vicealcalde.

Este solar es un continuo dolor de cabeza para los vecinos de la zona, y para el Ayuntamiento, que tiene que estar achicando agua y tratando la zona contra los mosquitos para evitar su proliferación y que se convierta en un foco de infecciones. Además colinda con uno de los apeaderos del tranvía de la línea que llega hasta la universidad UCAM.

Otro disuasorio que está en el punto de mira en la zona sur y que el vicealcalde ve «muy posible» se ubicaría en el plan parcial que está en proceso de reparcelación en la carretera hacia El Palmar, en el cruce del restaurante El Alias, ubicado en la carretera de Santa Catalina. Este aparcamiento tiene a su favor que está al lado de uno de los entronques con la Ronda Sur y cerca de una de las salidas de la A-30.

Un tercer nuevo aparcamiento que tiene claro el Ayuntamiento se ubicará en el solar situado en uno de los laterales del Centro de Iniciativas Municipales de Murcia (CIMM), en la carretera de Churra. De hecho, ya tiene ese uso de forma espontánea desde hace mucho tiempo. Este disuasorio tendría la doble función de ser público y privado para los integrantes de las empresas que utilicen las instalaciones del Centro.

«Nuestra intención es que todas las obras estén acabadas antes de las elecciones del próximo año», subrayó Gómez, Para ello, el Ayuntamiento utilizaría la fórmula de contratación por el procedimiento de urgencia. «Tenemos que dar alternativas a los ciudadanos para dejar el coche fuera de la ciudad una vez que la movilidad cambie con el nuevo diseño y se cierren más los accesos al centro urbano», insistió el vicealcalde.