Decepción en los vecinos de El Carmen por el escaso efecto del proyecto ADN
La suciedad y el diseño «sin sentido» de ciertas remodelaciones urbanas copan la mayor parte de las quejas sobre el barrio
Los residentes de El Carmen vuelven a reclamar mejoras en su barrio y dicen, sin ningún tipo de autocensura, que «el proyecto ADN Urbano fue más una fachada política que otra cosa. Sirvió para lavar un poco la imagen del barrio y ya está. Entre lo que era sobre el papel y lo que finalmente se hizo, hay una diferencia muy grande. Remodelaron lo que pudieron y a su antojo», apunta Fanny Meroño, vecina del barrio y una de las que participó en las ágoras ciudadanas que sirvieron para la redacción del proyecto.
No es la única que lo piensa. También la farmacéutica de la calle Galdo, Mercedes Hernández, cuestiona la utilidad de la remodelación que se hizo, en el marco del proyecto, de la plaza que hay ubicada entre su calle y Santa Úrsula. «La han puesto peor de lo que estaba. No hay ni un solo banco para sentarse. Y dime tú a mí esos montículos que han dejado para qué sirven. No tiene ningún sentido». Como estas, los vecinos tienen muchas más críticas sobre la gestión del proyecto ADN, pero sobre todo se repiten en sus bocas la suciedad de las calles, la falta de iluminación y la ausencia de vigilancia policial. «Y la degradación del barrio, porque hay casas y edificios que están muy abandonados. Ahí es donde habría que incidir para que esto se recupere», añade Hernández.
Los vecinos de la calle Galdo dicen necesitar un paso de peatones que cruce hasta la farmacia que regenta Hernández. Esa demanda y la de los contenedores de Santa Úrsula es la que más copa las quejas, puesto que «son los únicos que hay para un montón de calles y todos tiramos la basura aquí», añade Fernando Pérez, vecino de la calle Diego Hernández. «A las ocho de la tarde toda la basura está en el suelo, pero no solo porque haya gente marrana, sino porque se llenan. Si no pueden soterrarlos porque es caro o por falta de espacio, por lo menos que pongan más de los que hay, porque los olores son horrorosos», incide. Y sobre la misma plaza de la que habla la farmacéutica, añade que «lo único que han hecho es quitar la tierra que había en el suelo para poner cemento». Por eso, su opinión sobre el proyecto ADN Urbano se reduce a que «fue una mera operación cosmética para adecentar mínimamente unas cosas del barrio, pero ya está. Los problemas importantes los seguimos teniendo. Y ojo, que hay cosas que se han hecho bien, como las aceras en las puertas de los colegios».
También los comerciantes de la calle Ruiz Hidalgo han pedido en varias ocasiones que se soterren los contenedores, «que es realmente lo que más falta hace. El ADN fue un lavado de cara y ya está. Para mí, hicieron muy poco. Pusieron unos árboles en una calle que hay al lado de la plaza Pintor Pedro Flores y algo también hicieron en el paseo Corvera. Ya está», añade la dueña de una papelería de la zona que prefiere quedar en el anonimato.
«Aparte de pintar unas cuantas paredes y de poner adoquines, no hemos notado mejoría», dice José Oñate, presidente de la asociación de comerciantes de El Carmen. Como representante de los pequeños empresarios, asegura que echan de menos «más reactivación de la zona, hacer lo que hicieron en el Rex con los cines Floridablanca, que fue algo que se propuso en su día al Ayuntamiento, pero como era para El Carmen, pues no quisieron». Además de esta propuesta, Oñate cuenta que «en las ágoras de ADN y en otras reuniones que hemos tenido con concejales también hemos pedido ampliar las aceras de la pasarela de Miguel Caballero, porque son muy estrechas y la gente se tiene que bajar. Pero seguimos esperando. Aquí todo es esperar».
El futuro de 'Mixtura'
«El proyecto estrella de ADN era 'Mixtura'», una feria mensual intercultural en la que residentes de diferentes nacionalidades instalaban puestos de cocina y productos en la citada plaza de la calle Santa Úrsula. «La idea no es mala, porque son calles que se reactivan y hay movimiento por la zona, y esas cosas dan seguridad, las calles están más transitadas... Pero después del verano no se ha retomado», añade Oñate. En este sentido, también Fernando Pérez lamenta que «no se sepa qué va a ocurrir con iniciativas como esta, que son interesantes y además empezó con un gran éxito».
Otros vecinos de la zona apuntan que 'Mixtura' fue «un despropósito», ya que ocasionaba problemas por los humos porque «la plaza es muy pequeña». Añaden que «la integración no puede quedarse en una plaza» y que «'Mixtura' debería moverse por toda la ciudad, en lugar de adscribirse a una cosa de El Carmen».
Más allá de la polémica de ADN, es Fernando quien muestra más optimismo sobre El Carmen: «La gente tiene una imagen muy distorsionada del barrio. No es inseguro en absoluto. Tiene problemas de suciedad y de integración, pero no de seguridad. Es una pena que se haya degradado con esa idea. Una idea, sinceramente, fomentada por el racismo».
Renovar el parque de viviendas como parte de la solución
La farmacéutica y otros vecinos coinciden en que la degradación del barrio es un círculo vicioso que gira alrededor del parque de viviendas, en el que falta mucha inversión y remodelación. Explican que eso provoca que los alquileres sean muy bajos y, cuando esa situación se generaliza, se atrae a gente sin recursos. Hay proyectos arquitectónicos sin realizar que ahondan sobre la remodelación del parque. Uno de ellos es 'Ziudad', concebido por el estudio La Mirateca y que recibió en 2018 el primer premio del certamen 'Ciudad, Creatividad, Cultura y Emprendimiento', concedido por el Ayuntamiento.