Cámara sostiene que el 'caso Nueva Condomina' se urdió para echarle de la política

El que fuera alcalde de Murcia durante veinte años, Miguel Ángel Cámara, que acaba de ser absuelto con todos los pronunciamientos favorables en el 'caso Nueva Condomina', en el que fue juzgado junto a dos exaltos cargos de Urbanismo por un presunto delito de prevaricación administrativa, considera que este caso fue urdido con el fin de apartarle de la política.

Cámara expuso esa apreciación a sus más allegados ya que, conocida la sentencia del Juzgado de lo Penal número 5 de Murcia, que se hizo pública este viernes, se negó a hacer declaraciones a los medios.

Consultado por EFE sobre esa resolución judicial, se limitó a decir que la misma recoge lo que realmente ocurrió, en el sentido de que siempre actuó dentro de la ley en todo lo relativo al convenio urbanístico firmado con el dueño del Real Murcia, Jesús Samper, y que tenía como principal objetivo la construcción de un nuevo estadio para el equipo. El exalcalde de Murcia añadió que su propósito es no hacer manifestaciones sobre la sentencia, remitiéndose a sus abogados, los letrados murcianos Vicente San Martín y José María Caballero.

El primero afirmó que el Juzgado proclamó la total inocencia del exregidor municipal en una sentencia que, según comenta, destaca por la precisión de los hechos probados y, sobre todo, «porque es una sentencia justa». El letrado añadió que la misma deja claro que, en contra de lo sostenido por las acusaciones, no hubo secretismo alguno en torno al protocolo de intenciones, que fue el primer paso para el convenio y que este se ajustó a la legalidad.

En cuanto a la cesión del 10% del aprovechamiento, extremo controvertido, la sentencia recogía que, en la práctica, el Ayuntamiento recibió mucho más de lo que le correspondería en aplicación de ese porcentaje. También descartó el trato de favor dado a Samper, argumento utilizado por el fiscal Anticorrupción, Juan Pablo Lozano, y las acusaciones particulares al señalar que la corporación presidida por Cámara, al exigirle la prestación de una fianza para garantizar la construcción del nuevo estadio, fue más exigente que las condiciones exigidas por la legislación.

Finalmente, San Martín se mostró satisfecho con la decisión de la magistrada, que aunque no accedió a deducir de oficio testimonio contra los testigos Ginés Navarro, concejal de Urbanismo en el momento de los hechos, y José Salvador Fuentes Zorita, portavoz entonces del Grupo Municipal Socialista, que defendió «vehementemente» el convenio, sí le quita credibilidad a sus testimonios, al considerar que no dijeron del todo verdad. La magistrada señala en la sentencia que no accede a la deducción de testimonio pedida por el letrado en la última sesión del juicio «dada la dificultad probatoria de este delito».

Por su parte, la fiscalía estudia si plantea recurso contra la misma, algo que se está pensando dadas las dificultades que entraña revocar una sentencia absolutoria si la misma, como afirma la jurisprudencia del Tribunal Supremo, no resulta ilógica, absurda o arbitraria.

La absolución de los tres imputados en esta pieza separada del caso Umbra, de presunta corrupción urbanística, se une al sobreseimiento de otra que el mismo juez instructor, David Castillejos, abrió, en este caso, contra los suegros de Cámara. El archivo fue acordado el pasado febrero por un auto de la Audiencia Provincial de Murcia en el que se reprochaba haber abierto una causa «con trazos de generalidad intolerables».

El juez Castillejos acordó la apertura de la misma para investigar si unas compraventas efectuadas por los suegros del exalcalde podrían encubrir supuestas dádivas entregadas a este, de lo que no apareció indicio alguno, lo que llevó a la Audiencia a decretar el sobreseimiento de las actuaciones.