El Ayuntamiento de Murcia ejecutará nuevas obras ante el «estado de deterioro» de la estación de autobuses

Cierto es, según indican fuentes municipales, que los trabajos se encuentran pendientes de recepción y, por tanto, de la certificación de que estos se han ejecutado conforme a lo previsto. Sin embargo, no se ha acabado de cerrar este encargo y la junta de gobierno del Ayuntamiento de Murcia ha tenido que aprobar hace apenas unas semanas una propuesta para ejecutar unas nuevas obras de reparación en la terminal de autobuses murciana. El objetivo de este proyecto no es otro que el de eliminar las filtraciones que se producen hacia el aparcamiento subterráneo de San Andrés. Concretamente, el agua recala desde el área destinada al aparcamiento y mantenimiento de los autobuses.

El informe de los técnicos municipales habla de «34 goteras» y de «la existencia de tres grietas verticales en el muro del sótano perimetral situado en la zona». Estos desperfectos están provocando, prosigue, «un deterioro del forjado de la cubierta del inmueble», que incluye «daños en la estructura, provocando tanto depósitos de sales como su carbonatación, ocasionando la corrosión de las armaduras inferiores y con ello el desprendimiento de su recubrimiento de hormigón». En definitiva, ante el «estado de deterioro avanzado» se hace necesaria la «demolición de pavimento, así como su reposición y la impermeabilización, tanto en las zonas de rodadura y maniobra de las plazas de estacionamiento como en la zona de acera entre la estación y la zona de parking«.

En principio, y según entiende la Administración municipal, dichos trabajos debían ser ejecutados y sufragados por la UTE que explota las instalaciones en régimen de concesión, y que está compuesta por Nex Continental Holdings SLU (Alsa) y Damas SA. Se basa, para ello en lo establecido en el pliego de condiciones del contrato, que establece que «la adjudicataria deberá conservar las construcciones e instalaciones y mantenerlas en perfecto estado de funcionamiento, limpieza e higiene». Sin embargo, dichas empresas rechazaron el requerimiento formulado por el Consistorio ya que, en su opinión, «las filtraciones no son directa ni indirectamente atribuibles a cualquier tipo de acción u omisión de la concesionaria», sino que se deben a «defectos de construcción y daños estructurales de las instalaciones objeto de concesión, cuya existencia es previa y anterior a la gestión de las instalaciones por esta parte».

Ante esta negativa, el Consistorio no solo ejecutara los trabajos a instancia de Aparcamientos la Fuensanta, empresa concesionaria de la gestión del parking, sino que lo hará de manera subsidiaria y repercutirá posteriormente el coste a la responsable de la gestión de la terminal, con un presupuesto estimado de 75.023, 55 euros, que es, prácticamente la misma cantidad que esta abona al Ayuntamiento anualmente en concepto de canon de explotación. En principio, esta cantidad saldrá de la garantía prestada por la UTE al inicio de la concesión, hace casi nueve años, y que se encuentra cerca de caducar ya que fue firmada por una década.

«Llevamos tiempo requiriendo a la UTE concesionaria de la gestión de la estación que acometiera estos trabajos, pero no había manera de que nos respondiera, mientras veíamos, además, que pasaba el tiempo, finalizaba la concesión y esta se nos escapaba», explica Pedro Hernández, propietario de la empresa que gestiona el parking de San Andrés. Hernández reconoce, no obstante, que el mantenimiento de esas instalaciones viene siendo deficiente durante los «en torno a 33 años de vida de este aparcamiento, momento en el que entregamos las llaves a los anteriores gestores de la estación de las llaves del nuevo recinto anexo, que tiene 7.500 metros cuadrados de superficie».

«Nadie se hace responsable de lo que ocurre en un espacio que se utiliza para aparcar vehículos privados, de lavadero, en el que se suministra combustible y en el que se conectó a nuestra tubería de pluviales el desagüe de los cuartos de baño de la estación, lo que nos genera multitud de problemas, ya que la conducción no estaba pensada para ello», clamaba Hernández. LA VERDAD ha intentado ponerse en contacto con Alsa sin éxito.

Estos problemas de mantenimiento alimentan, además, el debate sobre el actual estado de las instalaciones y de si estas necesitan un lavado de cara que no se consuma ante un posible futuro traslado de la estación o, al menos, de parte de sus servicios a otros enclaves. En el horizonte se encuentra la construcción de la estación intermodal del Carmen, junto a la terminal del AVE. No obstante, el actual gobierno municipal señaló que el espacio disponible en este punto no ofrecía capacidad suficiente para acoger todas las líneas. Así, mientras que en los gobiernos del PP se instaló la idea de mantener operativa la estación de San Andrés, la actual edil de Movilidad Sostenible, Carmen Fructuoso mencionó el año pasado la posibilidad de construir una nueva infraestructura en la zona norte, debate que generó cierta polémica y que ha acabado por descartarse.