La autorización de la CHS desbloquea la recuperación del primer meandro del río

Otro informe emitido el año pasado por el organismo de cuenca ya había obligado a la Concejalía de Planificación Urbanística, Huerta y Medio Ambiente a introducir cambios en el proyecto inicial «ante el posible riesgo de desbordamientos», situación paradójica, dado que uno de los objetivos del proyecto es, precisamente, el de reducir la virulencia de inundaciones y avenidas, gracias al ensanchamiento de la llanura aluvial, al mejor drenaje de las terrazas y a la disminución de la velocidad del caudal a su paso por el codo.

Finalmente, según indican fuentes municipales, la CHS ha determinado que la propuesta presentada no producirá una afectación sustancial de la inundabilidad en la zona, configurada, lógicamente, como de flujo preferente.

Dicha decisión debe permitir ahora al Consistorio meter la velocidad de crucero para acometer una propuesta que llega financiada por fondos europeos 'Next Generation', concedidos a través de la Fundación Biodiversidad, y que, en principio, debe estar ejecutada antes de diciembre del año próximo. Así, la Concejalía espera aprobar próximamente el proyecto definitivo, si es posible, en la reunión de la Junta de Gobierno de esta misma semana, el cual cuenta con un plazo de ejecución de un año.

A partir de ahí, será momento de que la propuesta entre en el Servicio Municipal de Contratación, para que este redacte los pliegos administrativos, dado que los pliegos técnicos, los que dependen de la Concejalía de Planificación Urbanística, Huerta y Medio Ambiente, ya se encuentran listos. «Lo normal es que ahora sea todo muy ágil, porque además hay que cumplir con unos plazos», explica el concejal del ramo, Antonio Navarro Corchón. De hecho, resulta llamativo el tiempo que se ha acabado demorando una iniciativa en la que se lleva trabajando desde hace años, dentro del proyecto Murcia Río, y cuya financiación con fondos europeos fue concedida la legislatura pasada, hace ya más de dos años.

En total, el Ayuntamiento recibirá 1.670.158 euros de dinero europeo –a los que el Consistorio deberá sumar alrededor de 100.000 euros– para acometer una primera actuación de recuperación en el antiguo meandro Chico del Vivillo, que se emplazaba antaño al paso del río por la pedanía de Rincón de Beniscornia. Y es el Plan de Defensa de Avenidas, ejecutado en la década de los noventa por la CHS, el que trajo consigo un encauzamiento del Segura que se lo llevó por delante junto a otras curvas del cauce.

El objetivo de dicha intervención no era otro que el de reducir el riesgo de inundaciones. Sin embargo, estudios posteriores han concluido que estas actuaciones no fueron óptimas, no solo desde el punto de vista ambiental sino también en lo que se refiere a los aspectos puramente hidrológicos, ya que la configuración actual del cauce no es precisamente la más adecuada para amortizar posibles crecidas.

El proyecto redactado por la Urbanizadora Municipal (Urbamusa) conforme a las indicaciones de la Concejalía competente y al trabajo desarrollado junto a las universidades públicas, recoge las indicaciones dadas por la CHS. De hecho, las apreciaciones realizadas por el organismo de cuenca han limitado la intervención en las parcelas agrícolas privadas de la margen derecha del río, centrando esta en la izquierda, que es donde se ubicaba el codo del meandro.

No se ha permitido así la modificación de la altura de la mota meridional, aunque, según aclaran fuentes técnicas, sí se mantiene en esta margen finalmente la ejecución de la primera playa fluvial inundable del municipio, que se acometerá sobre una porción de relleno con tierra. Será, de esta manera, en la orilla septentrional donde se realizarán las principales actuaciones de fomento de la biodiversidad y de generación de itinerarios para el disfrute ciudadano.