La red de aparcamientos disuasorios multiplicará las plazas en el casco urbano de Murcia y en las pedanías

Uno de los propósitos que aspira a colmar el equipo de gobierno es aumentar las zonas para aparcar en los principales viales de la ciudad y las entradas al municipio. La medida también se hará extensiva a las pedanías. La fórmula para hacerlo que plantea el Ayuntamiento de Murcia es valerse de suelo público disponible para habilitar en este terreno las nuevas instalaciones.

Además, otra línea de trabajo pasa por adecuar y regular los llamados aparcamientos espontáneos. Se trata de espacios que aprovechan los conductores para dejar estacionados sus vehículos, aunque el lugar no esté habilitado de forma expresa para recibir este uso.

Para darle forma a este planteamiento, los trabajadores del Servicio de Patrimonio llevan semanas valorando las posibilidades que existen para crear aparcamientos disuasorios en la zona norte. Uno de los enclaves considerados estratégicos son las avenidas Juan Carlos I y Juan de Borbón. Las inmediaciones del nuevo edificio de Hacienda es uno de los puntos que estrenará zona para aparcar. El inmueble, que será inaugurado en breve, recibirá a 421 funcionarios. Centralizará en la calle Violonchelista Miguel Ángel Clares a todos los trabajadores de la Agencia Tributaria que en la actualidad se encuentran repartidos entre las dependencias de este organismo, que existen en las sedes de Gran Vía y en las calles Acisclo Díaz y Salvador de Madariaga, esta última en el barrio de Santa María de Gracia.

En el desayuno informativo que ofreció el 27 de diciembre el alcalde, José Ballesta, para hacer balance del año 2019, anunció que las plazas en los parkings públicos se duplicarían, hasta alcanzar las 16.000.

Ronda Sur también estrenará instalaciones para aparcar. Lo mismo sucederá en las entradas a la ciudad desde la pedanía de Puente Tocinos, así como en el acceso por la carretera de Alcantarilla. Los técnicos de la Concejalía de Movilidad estiman que, cuando la propuesta esté completamente diseñada, los nuevos aparcamientos disuasorios estarán listos en seis meses. Las actuaciones las están coordinando de manera conjunta los servicios de Tráfico, Transporte y Patrimonio.

En el caso de las pedanías, son dos las fórmulas que se barajan. Una plantea que dueños de parcelas que estén sin edificar y no reciban ningún uso específico puedan donar las mismas al Consistorio. Los gastos derivados de los trabajos de adecuación que se tendrían que realizar y del posterior mantenimiento correrían a cargo municipal.

Otra fórmula que se encuentra en fase de estudio es que el equipo de gobierno lance una convocatoria en virtud de la cual los dueños de la parcela en la que se construirá el aparcamiento reciban una compensación en forma de alquiler anual. Los interesados en optar a esta iniciativa deberán reunir una serie de requisitos que ponga la Cocejalía, según la superficie mínima que se establezca y las necesidades reales que se deban cubrir en cada pedanía.

La mayor parte de los parkings disuasorios, estén en el casco urbano o en las pedanías, serán gratuitos, aunque en algunos casos, para facilitar la rotación de los vehículos, no se descarta que el servicio presente «un coste mínimo para los usuarios», precisan fuentes de la Concejalía de Movilidad Sostenible.

Desde este departamento van a iniciar una ronda de contactos con los presidentes de las juntas municipales que han ofrecido sus pedanías para participar en el proyecto. Es el caso de Alquerías, Rincón de Seca, Puente Tocinos, La Arboleja, Algezares, Zarandona y Barriomar.

Con las nuevas zonas para aparcar, apuntan desde el departamento de Movilidad Sostenible, se busca habilitar espacios para los propios vecinos o para los que tienen que acudir a Murcia o a sus pedanías por diferentes motivos, ya sean laborales, escolares o sanitarios. Además, el uso de los aparcamientos llevará implícito que se produzca una reordenación del tráfico, lo que, a su vez, contribuirá a reducir la contaminación y aumentar la seguridad vial.

La edil del área, Rebeca Pérez, confirmó que «los aparcamientos tendrán precios asequibles, en unos casos, y serán gratuitos, en otros». También avanzó que «estarán bien situados y dotados de un sistema de videovigilancia».

En la propuesta definitiva que elaboren los técnicos también vendrán recogidos los equipamientos con los que contarán los aparcamientos. Se trata, por ejemplo, de expendedor de tiques, control de matrículas, red de evacuación de pluviales, señalización horizontal que ubicará las plazas para estacionar, vallado perimetral para delimitar los parkings y puesto de vigilancia.

Los expertos señalan igualmente que en varios casos será necesario hacer obras en las parcelas para adecuarlas a su uso como aparcamiento. La mayor parte de las actuaciones serán de compactación y aglomerado del terreno.