Quejas por los retrasos en la apertura del cuartel de la Policía Local de la zona oeste de Cartagena
Crece el malestar vecinal por los robos, mientras la reforma de la antigua gasolinera de Cuesta Blanca para montar un destacamento se demora
La instalación de un cuartel de la Policía Local en Cuesta Blanca, anunciada hace 18 meses, tendrá que esperar a 2023 pese a las reiteradas ... peticiones vecinales para acelerar el procedimiento y contar con una base que permita un despliegue preventivo y represivo que acabe con las oleadas de robos. Los ladrones atemorizan desde hace años a los residentes y a los comerciantes de las poblaciones y los núcleos rurales de las diputaciones de Perín, La Magdalena y Los Puertos. El proyecto está hecho, pero es necesario tramitar la cesión de uso, mediante un arrendamiento, «porque no podemos invertir dinero público en la reforma de unas dependencias privadas sin contar con un acuerdo de este tipo», indicaron a LA VERDAD fuentes municipales.
La red de cuarteles periféricos incluye actualmente los de Cabo de Palos, El Algar y Pozo Estrecho. Este último será sustituido pronto por unas dependencias totalmente nuevas. Las quejas sobre la falta de efectivos para todos ellos han arreciado durante lo que va de año, dado que los sindicatos policiales dicen que los que hay son insuficientes. También avisaron el pasado verano de que varios de los destacamentos llegaron a estar cerrados varios días.
Contar con bases de la Policía Local fuera del casco urbano que complementen a la del Parque de Seguridad, en El Hondón, está en el programa de mejora de la seguridad del Ayuntamiento desde 2011. La primera intentona supuso dar uso al Castillito de Los Dolores, que había sido previamente adquirido y restaurado con fondos municipales. Finalmente, el uso de las instalaciones fue muy limitado. Su cierre tuvo lugar a raíz de las dificultades para acceder a determinadas dependencias, porque se trata de un edificio protegido con restricciones de uso. Tras descartar esa posibilidad, para ubicar patrullas que tardaran menos tiempo en llegar a localidades de la zona oeste, se pensó en otras opciones.
Cobertura en pocos minutos
Asolados por las bandas de ladrones, los propietarios de explotaciones agrícolas y ganaderas y de viviendas en partidas rurales de La Aljorra y sus alrededores exigieron en 2013 y 2014 un cuartel en esta localidad. Sin embargo, lo único que consiguieron fue que el Ayuntamiento pusiera una oficina de denuncias en el centro social, de funcionamiento muy intermitente.
Los problemas de inseguridad por los allanamientos y los hurtos han continuado hasta la actualidad en toda la demarcación oeste del municipio. Por eso, el actual gobierno municipal llegó a un acuerdo el año pasado con los dueños de una gasolinera en Cuesta Blanca, que cambió de ubicación y dejó libres las instalaciones situadas frente al centro de salud.
La elección de esta población responde a que permite que una patrulla con base allí pueda actuar en cualquier paraje de su zona de influencia en menos de un cuarto de hora. También cubrir con una ronda relativamente corta los principales núcleos habitados. El objetivo es no tener que desplazar cada vez a patrullas especiales desde Cartagena, que pueden tardar 25 o 30 minutos en llegar.
Un año y medio de espera
El Ayuntamiento pactó el cambio de sitio de la estación de servicio, para situarla a la entrada de la localidad, junto a una rotonda más transitada, a cambio de negociar con sus dueños la cesión de la antigua caseta. El éxito de la gestión fue anunciado en primavera de 2021. Pero, desde entonces, lo único que se ha hecho allí es vallar el perímetro.
«No tenemos más información que la que nos transmite el concejal, Juan Pedro Torralba, de que el cuartel estará ahí. Los técnicos encargados de proyectar la reforma, que incluye eliminar la pérgola de la antigua estación de servicio, estuvieron aquí el año pasado. No me consta que hayan vuelto», explicó el presidente de la Asociación de Vecinos de Cuesta Blanca, Marcos Pividal.
Medio centenar de agentes harán desde final de año rondas en prácticas en barrios y diputaciones
Contar con cuarteles desplazados en la plaza de La Merced del casco histórico, en El Algar, en Cabo de Palos, en Pozo Estrecho, en La Azohía (en verano) y, próximamente, en Cuesta Blanca exige de un mayor número de efectivos que la Policía Local irá incorporando. Tras la entrada de 49 agentes en 2019, a finales de este año está prevista la admisión de otros 45, según confirmaron fuentes municipales. Uno de los objetivos principales que el concejal de Seguridad, Juan Pedro Torralba, pretende cubrir con su entrada son las brigadas de barrios y diputaciones. Ya hay agentes motorizados cubriendo desde Barrio Peral y Los Dolores hasta Cuatro Santos. En unos meses entrarán en servicio destacamentos en el Sector Estación y la Barriada Virgen de la Caridad.
Hace una semana comenzó el proceso de las pruebas psicotécnicas. Está previsto que, en diciembre, los candidatos admitidos empiecen a hacer rondas de vigilancia acompañados por otros agentes.
En la Escuela de Seguridad Pública del Ayuntamiento de Cartagena (Espac), los nuevos agentes aprenden todo lo que necesitan saber sobre ordenanzas municipales, código de la circulación, derecho penal y procesal, técnicas de investigación, manejo del armamento y tiro.
Pozo Estrecho estrenará base en octubre junto a la escuela de música
El cartel que reza 'Policía Local Cartagena' ya luce en la fachada de la nave de 200 metros cuadrados situada a espaldas de la Escuela de Música de Pozo Estrecho, que será inaugurada como nuevo cuartel en octubre, según confirmó el concejal de Seguridad, Juan Pedro Torralba.
Allí quedarán reubicados los diez agentes que actualmente desarrollan su tarea de tomar nota de las denuncias y realizar patrullas por todo el entorno, en tres turnos, desde la actual sede. La construcción del cuartel ha supuesto una inversión de 450.000 euros durante doce meses de obras.
Solo falta el cableado eléctrico, la instalación de conexiones para los ordenadores y la red de comunicaciones. La demarcación que cubrirán los diez agentes asignados va hasta El Albujón, por un lado, y hasta La Puebla, por el otro.
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