Nuevo ultimátum de cierre al Camping Caravaning si el 13 de agosto siguen sus deficiencias

Fuentes municipales han advertido en varias ocasiones a los gestores y a los vecinos de que la seguridad está por encima de todo y que los incendios de octubre de 2021, con 23 parcelas arrasadas, y de abril de este año, con un fallecido en su casa prefabricada, han dado lugar a detectar infinidad de deficiencias. Todo ello con un permiso de actividad pendiente de ratificar desde verano de 2019 y denegado ahora por segunda vez.

Hay un primer informe municipal de finales del año pasado que señala que la «causa más probable» del incendio del 3 de octubre fue «un cortocircuito por la manipulación o la sobrecarga de la instalación eléctrica por parte del propietario de la parcela en la que comenzó el fuego». En él se recoge que el fuego arrasó completamente todas las construcciones y enseres de 18 parcelas y causó daños considerables en cinco. Los redactores ya pusieron de manifiesto que entre los elementos destruidos había bombonas de butano y bastante «material combustible depositado sin control». Se comprobó que muchas calles tienen tres metros de ancho, medida insuficiente para los vehículos de emergencias. También la falta de hidrantes, bocas de riego equipadas y depósitos, y que los extintores eran pocos.

El suministro eléctrico es a través de una sola acometida que explota la empresa gestora, aunque no tiene permiso como comercializadora, sin contadores singulares por parcela. Los cuadros eléctricos son compartidos por varias casas y hay conexiones por el suelo y entre setos, en vez de ir soterradas o ser aéreas, como exige la ley. Asimismo, la red de saneamiento «no se sabe si llega a todas las viviendas» y «no hay red de recogida de pluviales». También hay incumplimientos relacionados con la Ley de Costas y un parque acuático sin permiso, aunque esto no afecta a la seguridad.

Hubo otro incendio el pasado 29 de abril en una autocaravana. Murió un hombre que por los primeros datos de la investigación lo provocó él mismo. En menos de un mes la concejal Cristina Mora firmó el 18 de mayo un decreto con la suspensión de actividad del establecimiento. Ese último suceso influyó en la decisión porque seguían sin resolver la mayor parte de los defectos de seguridad.

Posteriormente los representantes de Capfun han mantenido reuniones con técnicos de Urbanismo y con el jefe del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento del Ayuntamiento, Francisco Gómez Ávalos, pero sin acreditar, al menos a juicio de estos últimos, todas las mejoras exigidas. De ahí la emisión el pasado día 13 del nuevo decreto que pone más difícil la continuidad de la actividad en el camping.