Un juzgado de Cartagena investiga si una cirujana operó a varias mujeres sin titulación
Dos pacientes denuncian a la supuesta médico, de nacionalidad venezolana, por las graves secuelas que le dejaron las intervenciones que les realizó
LA VERDAD
Lunes, 3 de febrero 2025, 13:17
Una supuesta cirujana plástica, de nacionalidad venezolana, que no contaba con la homologación para ejercer en España, está siendo investigada por Juzgado de Instrucción Número 5 de Cartagena por provocar, presuntamente, graves secuelas a, al menos, dos mujeres tras someterse a una cirugía estética.
La mujer está acusada de presuntos delitos de lesiones, falsedad documental, intrusismo profesional y suplantación de identidad, debía comparecer este lunes en sede judicial, aunque finalmente no se presentó. La mujer se promocionaba en redes sociales como cirujana plástica con 20 años de experiencia y contaba con miles de pacientes satisfechos, aunque no figura en ningún colegio médico español ni cuenta con la certificación oficial para ejercer en el país. Fue a través de esas plataformas el medio que utilizaron las víctimas para contactar con ella. A día de hoy continúa publicando fotografías y videos de sus procedimientos. Una vez cerraron las citas de la intervención estética, la investigada alquiló un quirógrafo en el hospital Virgen de la Caridad de Cartagena, donde, supuestamente, habría operado a medio centenar de pacientes.
La abogada de una de las afectadas, Rosa Egea, explicó que un cirujano murciano con titulación homologada fue quien alquiló el quirógrafo. Este facultativo también fue citado a declarar este lunes.
La primera denunciante se puso en manos de la supuesta cirujana en el año 2023 para retirarse unos implantes de biopolímeros en los glúteos, sustancia prohibida en España. La cirujana le ofreció un «paquete quirúrgico» que incluía una mamoplastia, liposucción y transferencia de grasa. Tras la operación, la paciente sufrió infecciones graves y los biopolímeros no fueron retirados correctamente, desplazándose hasta su pierna izquierda y poniendo en riesgo su vida.
El segundo caso, ocurrido en junio de 2024, también incluyó una abdominoplastia, lipotransferencia y elevación de pecho. Días después, la paciente sufrió complicaciones severas, incluyendo hemorragias internas y una laceración hepática de grado 4, lo que la llevó a ingresar en la UCI durante cinco días.
El precedente del 'caso Sara Gómez'
Esta investigación recuerda al caso de Sara Gómez, la mujer de Alcantarilla fallecida en enero de 2022 tras una lipoescultura en la misma clínica de Cartagena. Su muerte llevó a la aprobación de una ley en 2024 que establece que solo cirujanos plásticos acreditados pueden realizar este tipo de procedimientos.
Sin embargo, la letrada de la denunciante señaló que la normativa no ha evitado que se sigan produciendo casos como estos, donde profesionales sin acreditación logran operar gracias a la connivencia de clínicas y otros facultativos, poniendo en riesgo la salud de los pacientes.
En un escrito, los familiares de Sara exponen que este tipo de intervenciones fraudulentas «son continuadas y sistemáticas en dicho centro», y que «no han sido detectadas por los servicios de inspección sanitaria de la Consejería de Salud de Murcia».
En su denuncia, explican que «una doctora venezolana viaja regularmente a Cartagena para realizar cirugías estéticas sin estar colegiada en España. Para dar apariencia de legalidad a estas intervenciones, la documentación clínica es firmada por un cirujano español titulado, quien sería cooperador necesario en la trama».
El escrito también mencionan que, «si bien algunas de las cirugías no han generado complicaciones graves, otras han tenido consecuencias devastadoras, como el caso de una paciente que sigue hospitalizada y requiere múltiples intervenciones para corregir los daños sufridos».