La Guardia Civil de Cartagena traslada sus últimos servicios operativos al antiguo colegio Antonio Arévalo
En el acuartelamiento siguen en pie un edificio, que será reformado, y el bloque principal, que será derribado en breve para iniciar la reconstrucción
Los equipos de Seguridad Ciudadana, Policía Judicial, Equipos Roca, las unidades de delitos tecnológicos y de violencia de género y los servicios administrativos de la ... Quinta Compañía de la Guardia Civil, con sede en Cartagena, comenzarán a prestar atención al público y a trabajar a partir de mañana en el antiguo colegio Antonio Arévalo, en la barriada de San Ginés. Se trata de los seis últimos servicios que quedaban en las dependencias de Ángel Bruna, tras la finalización de las obras de derribo de los principales bloques de viviendas, declarados en ruina en julio y desalojados en agosto.
Quedan en pie el edificio más moderno del recinto, que será reformado, y el bloque principal del acuartelamiento, donde aún trabajan unos 70 agentes. El derribo de este último comenzará en unos días, según indicaron fuentes de la Benemérita.
En el Antonio Arévalo estarán esos servicios hasta la construcción de un nuevo acuartelamiento en la misma parcela. El pasado lunes comenzaron las mudanzas de mobiliario, del material y de los vehículos. El plazo de construcción del nuevo acuartelamiento es de 30 meses. Operarios de la empresa encargada de los trabajos retiraron ayer parte del vallado de protección del interior del solar para reinstalarlo en los exteriores en la calle Ángel Bruna y comenzar cuanto antes la demolición restante.
Las instalaciones de la Guardia Civil ocupan la planta baja del antiguo colegio, donde ha sido necesario realizar una nueva distribución mediante la instalación de tabiques de placas de pladur. También han cambiado ventanas y rejas, renovada la red eléctrica, instalado el circuito de cámaras de seguridad y construida una rampa de acceso en la entrada, entre otros trabajos.
Quejas de la AUGC
Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) criticaron el tamaño de las oficinas «que es reducido». Esto es debido a la llegada, indicaron, de un nuevo Jefe de Compañía con empleo de comandante, que se incorporará en los próximos meses. Desde este colectivo insistieron «en la desorganización que ha existido en la demolición de edificios y traslado de las unidades». «Desde el principio nos quejamos de que se hubiera iniciado el derribo de edificios con guardias civiles trabajando en el acuartelamiento y solicitamos que primero se realizara la reforma del colegio Antonio Arévalo, después del desalojo de las dependencias y finalmente el derribo de los edificios», indicaron en un comunicado.
El Consejo de Ministros del día 10 de octubre aprobó un gasto de 31.956.070,04 euros para las obras de la nueva casa cuartel. La constructora Eneas SA es la encargada del derribo y del traslado de los escombros. También construirá los nuevos edificios, siguiendo un proyecto ya redactado y que en estos momentos está en revisión para posibles mejoras.
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