Cultura dice que restaurar San Ginés es un asunto municipal
La Consejería asegura que su obligación es solo velar por la conservación del monasterio y que el resto es un acuerdo entre el Ayuntamiento y Hansa
La Consejería de Cultura aseguró ayer que su obligación respecto al Monasterio de San Ginés de la Jara se limita a garantizar la conservación de ... los edificios que lo forman, al tratarse de un Bien de Interés Cultural (BIC), pero que la restauración de los inmuebles es un asunto que compete en exclusiva al Ayuntamiento de Cartagena por tratarse de unas obras previstas en un convenio con la empresa Hansa Urbana.
Fuentes del departamento que dirige Mabel Campuzano indicaron que a Cultura no le afecta la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) que desvinculó la restauración del monasterio por parte de su propietario, Hansa, de la situación del expediente relativo al proyecto urbanístico Novo Carthago, que impulsa esa misma mercantil.
La resolución judicial, de febrero de 2016, ha recobrado actualidad tras un informe jurídico de la Concejalía de Urbanismo según el cual el Consistorio debe instar a la compañía a retomar las obras y, si la empresa no actúa, asumirlas de forma subsidiaria y pasarle la factura.
Según desveló el Grupo Municipal MC, el Servicio Jurídico de Gestión Urbanística contestó días atrás a una consulta de la Plataforma Virgen de la Caridad que «la suspensión temporal del proyecto de reparcelación» de los terrenos de Novo Carthago «no es óbice para la prosecución de las obras de restauración» del monasterio. La suspensión fue aprobada por la Junta de Gobierno Local en mayo de 2018, bajo la presidencia de la alcaldesa y concejal de Urbanismo, Ana Belén Castejón. Lo hizo con un informe de la Asesoría Jurídica según el cual primero debe resolverse una causa judicial por presunta corrupción en la recalificación del suelo. En respuesta, Hansa paralizó la restauración y presentó un pleito donde reclama al municipio 34 millones de euros por daños y perjuicios.
Según el gabinete de la consejera, los técnicos de la Dirección General de Bienes Culturales sostienen que el fallo del TSJ solo afecta a las dos partes que firmaron el convenio del monasterio, una iniciativa complementaria al proyecto de construcción de 6.000 casas junto al Mar Menor.
Ley de Patrimonio
En Cultura señalaron que los dueños de los BIC solo están obligados a consolidarlos. Y añadieron que la Consejería ha intervenido varias veces desde el año 2007 para exigir a la empresa trabajos como la reparación de cubiertas y la consolidación del claustro. Ello ha evitado derrumbes.
La plataforma Virgen de la Caridad rechaza esta gestión y defiende que Cultura debe «requerir inmediatamente a Hansa Urbana a la restauración integral del monasterio y al Ayuntamiento a ejecutar las obras subsidiariamente, en el caso de que la mercantil obviase el requerimiento».
El colectivo, que espera respuesta a un escrito enviado hace meses, dice que la Comunidad no puede escudarse en que la Ley 4/2007 de Patrimonio Cultural de la Comunidad establece que Cultura «podrá ordenar» la restauración. Según la plataforma, tras la sentencia y a falta de un reglamento que desarrolle la ley regional, ese «podrá» ha de interpretarse como un «deberá».
La empresa espera el permiso para actuar en los edificios auxiliares
La Consejería de Cultura indicó ayer que la empresa Hansa Urbana le «ha remitido una propuesta de intervención sobre construcciones auxiliares, no sobre el antiguo convento en sí». Y apuntaron que, al ser un inmueble BIC; «se ha remitido a las instituciones consultivas, como la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) y el Colegio de Arquitectos». Cultura, que ya informó de esta misma tramitación el verano pasado, está «a la espera del pronunciamiento para continuar el procedimiento» administrativo. Entre tanto, diversos elementos del monasterio siguen sufriendo el deterioro, por ejemplo el desprendimiento del muro exterior.
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