Cincuenta niños de Cartagena esperan aún plaza en escuelas infantiles, tras ser reubicados otros sesenta

De los más de trescientos niños que se quedaban fuera antes de la municipalización de las de Pozo Estrecho, La Palma y La Aljorra, hace cinco años, ahora quedaron 110 tras acabar el periodo de solicitud de este nuevo curso. De ellos, sesenta ya han sido reubicados o los padres han rechazado continuar en lista de espera; el resto sigue aguardando. Según los datos aportados por la edil Irene Ruiz, fueron presentadas 930 instancias y fueron admitidas 820; 309 corresponden a renovaciones y 511 a solicitudes de nuevo ingreso. Son números muy parecidos a los del pasado curso, según las fuentes consultadas.

El Ayuntamiento ha mantenido los precios de los servicios de escolaridad para este curso, que oscilan entre una cuota mínima de 15,75 euros al mes y una máxima de 105 euros por servicio de escolaridad. Los servicios de comedor cuestan entre 22 y 88 euros al mes. La consecución de una plaza depende de la renta y de si los padres son trabajadores. En este caso deben justificar que se encuentran ambos desempeñando actividad laboral. Los horarios escolares de octubre a junio serán de 8.30 a 15.30 horas, incluido el servicio de comedor y siesta, aunque los centros permanecerán abiertos de 7.30 a 16 horas, para que las familias se adapten según sus necesidades. En julio de 2023, el horario sufrirá una pequeña modificación y los centros permanecerán abiertos de 7.30 a 15 horas.

Las cincuenta familias que siguen en lista de espera todavía tienen posibilidades de conseguir una plaza para sus hijos, puesto que si hay vacantes a lo largo del curso las podrán ocupar. Serán admitidos por orden de entrada de solicitud, indicaron fuentes municipales.

Los centros de Barrio de la Concepción y de Barrio Peral son los dos que más peticiones de plaza tuvieron; también los que más menores tienen en lista de espera: 19 y 14, respectivamente. Igualmente ocurre en las de El Algar y Villalba, con 9 y 8 cada una, según los datos aportados por el Ayuntamiento. También hay centros con sobrantes de plazas, como en Pozo Estrecho y La Aljorra, a los que los padres en lista de espera no quieren ir por razones de distancia.

Actualmente, hay once escuelas infantiles municipales y tres puntos de atención a la infancia. Estas últimas son guarderías de titularidad municipal gestionadas por empresas. Están en La Vaguada, La Aparecida, El Albujón y Nueva Cartagena. En ellas aún quedan plazas libres. Destaca el caso de El Albujón, que tiene vacías buena parte de sus instalaciones.

Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de Cartagena han reclamado en varias ocasiones hacer públicas esas cuatro. Su idea es acabar con las listas de espera y permitir que un mayor número de padres puedan conciliar la vida familiar con la laboral, explicó a LA VERDAD la presidenta de este colectivo, Sonia Montoya.

Fuentes de la Concejalía de Educación indicaron que «las concesiones administrativas que hay no se han rescatado porque siguen vigentes», y que al tener aún un plazo largo «el rescate no está ahora mismo sobre la mesa, porque habría que indemnizar a las empresas y eso no es factible».

Desde la Federación también se quejan de la escasas flexibilidad del horario de septiembre. «Fue el periodo de adaptación y había padres que tenían que recoger a sus hijos a las doce y media y llevarlos a otra guardería para poder seguir con su trabajo», aseguró la presidenta vecinal. Su crítica también es extensible a la falta de comedor este mes en la de Pozo Estrecho.

A la hora de elegir una guardería, los padres valoran diferentes factores, no solo el precio, ya que con las privadas no dista más de 20 euros, con respecto al precio más caro de la pública. «Yo miré la cercanía a casa, pero sobre todo el equipo de profesionales que atienden a los niños, aunque también las instalaciones del centro», detalló la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (Ampa) de la Escuela Infantil Bambi de El Algar, Clara Isabel Marín. Este centro, además de ser de los más grandes del municipio, es de los pocos que usa un método de enseñanza innovador, como es el Montessori.

Donde sí ha habido un aumento del número de niños ha sido en las guardería privadas del municipio. Según la presidenta de la Asociación de Escuelas Infantiles de Cartagena, María Dolores Reinaldo, las matriculaciones de niños nacidos en 2021 se han incrementado «alrededor de un 15%». A falta de cerrar los listados de este curso, Reinaldo calcula que la media de ocupación de los centros a los que representa estará muy por encima del 50%

Para la concejal de Educación, Irene Ruiz, el inicio del curso escolar en los centros de titularidad y gestión municipal «se está desarrollando con normalidad, tras dos años marcados por la pandemia». «Las primeras semanas fueron de adaptación. Los niños asistieron a clase en horarios especiales para habituarse al centro, a sus profesores y a sus compañeros. Seguimos trabajando para ofrecer a los más pequeños las mejores instalaciones y los mejores servicios, al tiempo que facilitamos la conciliación familiar y laboral», dijo.

El Gobierno local ya prepara la construcción de una guardería en Barrio Peral. Dará respuesta a una demanda creciente de familias de San Antón, Media Sala, Urbanización Mediterráneo, Nueva Cartagena, Cuatro Santos, Los Barreros y Ciudad Jardín. Estará ubicada frente al hipermercado Spar Parque de la Rosa, en la prolongación de Juan Fernández y la calle Pedro Díaz. Dispondrá de seis clases, una de ocho alumnos para niños de hasta un año, dos de 26 para los de hasta 24 meses y tres para chavales de hasta tres años, con 60 puestos escolares. La guardería también tendrá comedor, cocina, sala de reuniones y baños adaptados.

Para construirla, el Ayuntamiento ha obtenido una subvención de 1,2 millones de euros de la línea de ayudas europeas del Mecanismo de Recuperación, Transformación y Resiliencia.