Los agricultores de la Región de Murcia contienen el aliento por los efectos del calor invernal en los productos

Organizaciones del sector y expertos en la materia advierten de que, de continuar este calor invernal, se verán muy afectadas las cosechas de productos como la alcachofa, la lechuga o la uva de mesa, que necesitan del frío para su completar adecuadamente su ciclo natural y llegar a los mercados con adecuada calidad. También se verán perjudicados los frutales. Agricultores de Cieza ya dieron la voz de alarma hace unos días porque la floración se estaba adelantando dos meses, como consecuencia de las altas temperaturas que están 'engañando' a los árboles.

El jefe del servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca, Medio Ambiente y Emergencias, Francisco González, afirma que «a las plantas, al igual que las personas, les afectan los cambios de temperatura». En el caso de la lechuga y la alcachofa, la ausencia de frío hace que «se queden huecas por dentro» y pierdan el valor para el consumidor. Algo similar sucede con la uva. En la actualidad, se comercializan mayoritariamente variedades sin pepita. Pero esta ausencia de frío es la causante de que se encuentren frutos «con esbozos de semilla» que son rechazadas por los supermercados, «básicamente porque venden un producto sin semilla que luego la lleva, y eso origina quejas del cliente».

En lo que respecta a los frutales, comenta este funcionario de la Comunidad que «los árboles tienen que acumular un número determinado de horas frío para entrar en latencia y, posteriormente, empezar la floración en el mes de enero o febrero, dependiendo de la especie. Si no se produce esta situación de latencia, y los agricultores podan de manera anticipada, con el tiempo que tenemos la planta se confunde, empezando a brotar y salir las flores, como estamos viendo».

Estas flores anticipadas no tienen ningún valor. «Porque si de repente entra el frío, se helarán. Y si no, cuando empiece la época fisiológica en la que tienen que brotar de verdad, se caerán», argumenta el jefe de servicio.

Francisco González advierte, asimismo, de que otra consecuencia negativa de este calor invernal se verá en las plagas. «Si a usted le gusta salir a pasear por el campo, fíjese de que hay una población grandísima de mariposas. ¡Y en invierno no debe haber mariposas! Luego las mariposas ponen huevos, de ahí salen larvas y se multiplican las plagas». Esta situación ya se vio el pasado invierno, en el que los almendros se vieron afectados por la plaga del tigre, causada entre otros factores por las altas temperaturas de diciembre de 2021.

Por si fuera poco, advierte el jefe de servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura de que las plantas en invierno requieren un menor consumo de agua. «Pero con este calor, necesitan una dotación de recursos hídricos mucho mayor de la habitual. Y ya sabemos que en esta Región no sobra el agua, por lo que el problema se agudiza», lamenta González.

Tal vez lo más grave es que esta situación de altas temperaturas en invierno no se circunscribe a 2022, sino que viene de lejos y tiene pinta de que se repetirá en años venideros. Así que el sector agrario regional tiene bastante asumido que, de cara al futuro, será necesario realizar una importante readaptación.

El presidente de Coag, José Miguel Marín, es muy tajante. «Probablemente la Tierra haya vivido muchos cambios climáticos. Pero a nosotros el que nos ha tocado es este y debemos tener claro que va a ser muy difícil para mantener los cultivos que hoy conocemos», afirma. El responsable de Coag ya advertía hace unos días, en el tradicional balance del año, de que la agricultura tradicional en la Región podría tener los días contados, no solo por el cambio climático, sino por otras problemáticas como el aumento de costes y la falta de agua.

«Tenemos que ir pensando seriamente en el cambio de variedades, apostando por aquellas que no necesiten tanto el frío. Las sequías son graves, pero sabemos que son cíclicas y al final podemos ir tirando. Pero no podemos luchar contra los efectos devastadores de un cambio climático», insiste el presidente de Coag en la Región de Murcia.

Marín cree que los principales afectados serán los cultivos leñosos. En ese sentido, el presidente de la Asociación de Productores-Exportadores de Frutas, Uva de Mesa y Otros Productos Agrarios (Apoexpa), Joaquín Gómez, confirma la preocupación del sector «porque lo que tenía que brotar en febrero, lo va a hacer antes, con el consiguiente peligro de heladas y el trastorno que eso supone para las plantas y la calidad de los productos».

Joaquín Gómez también es partidario de apostar por variedades que no requieran del frío y asume incluso que se adelante la producción de fruta, aunque esto altere los hábitos de los consumidores.