Reutiliza el líquido de las conservas: así puedes aprovecharlo para darle un sabor diferente a tus platos

Estamos acostumbrados a tirar el líquido que acompaña a las conservas, pensando que su única función es la de conservar el producto. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Ese aceite, escabeche o incluso el líquido cuando el producto está al natural puede tener un aprovechamiento culinario sorprendente.

Es una situación similar a la que ocurre con la aquafaba, el líquido resultante de la cocción de garbanzos, tanto si los cocinamos en casa como si los compramos en conserva. Este líquido se ha convertido en un ingrediente muy valorado por su versatilidad: con él se pueden preparar cremas, merengues, pavlovas, tortitas, tortillas y una gran variedad de postres. Además, actúa como sustituto del huevo, lo que lo convierte en una excelente opción para personas veganas o con alergias. Pero no hace falta tener ninguna restricción alimentaria para disfrutar de sus ventajas.

Del mismo modo, los líquidos de las conservas de pescado o marisco pueden tener un segundo uso en la cocina, y no solo como recurso de aprovechamiento: también aportan un toque de sabor único a muchas recetas.

Dependiendo del tipo de conserva, al natural, en aceite o en escabeche, los usos pueden variar, y todos ellos tienen un gran potencial culinario:

Conservas al natural

El líquido que acompaña a este tipo de conservas es un excelente potenciador del sabor marino. Su composición lo hace ideal para añadir a un fumet de pescado, a un guiso marinero o incluso para cocer pasta dándole un toque salino y marino. También se puede usar para macerar pescado crudo en preparaciones como ceviches o tartares.

Conservas en aceite de oliva

El aceite de oliva que recubre las conservas absorbe gran parte del sabor del pescado o marisco, convirtiéndose en un ingrediente lleno de matices. Puede usarse como aliño para ensaladas, arroces o platos de pasta, para saltear verduras o pescados, o como base para salsas como la pil-pil o incluso para una mayonesa casera con sabor a mar. También se puede incorporar a la masa de empanadas para dar un toque especial.

Escabeches y otras variantes

Los líquidos de estas conservas son más intensos, por lo que pueden convertirse en salsas listas para usar. Puedes verterlos sobre unas simples patatas de bolsa o añadirlos sobre un pescado a la plancha o al vapor para elevar el plato sin esfuerzo.

Lo ideal es utilizar el líquido justo después de abrir la conserva, pero sabemos que eso no siempre es posible. Una opción práctica es congelarlo en cubiteras de hielo. Así, tendrás pequeñas porciones listas para usar cuando las necesites, sin desperdiciar nada y con la ventaja de poder dosificarlo según la receta.

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