Eloy Jiménez, el único candidato

Hoy sabremos si Víctor Fernández deja de ser entrenador del Cartagena o -por el contrario- sigue una semana más en su puesto. El técnico emeritense se reunirá con el dueño del club, Paco Belmonte, y de ahí saldrá una determinación: un despido, una dimisión o una continuidad condicionada a lo que suceda el próximo domingo en el Cartagonova en el partido ante el Sevilla Atlético. La derrota del domingo anterior contra el Cádiz (0-1) dejó tocado al entrenador albinegro, pero Belmonte y sus socios repitieron durante la semana que Víctor tenía crédito e insistieron en que este proyecto es «a medio y largo plazo».

No obstante, lo que los dueños del club esperaban ayer en el Municipal de La Línea de la Concepción era una reacción de los futbolistas y, como mínimo, que el Cartagena estuviera al nivel de sus dos últimas salidas, a Lepe y a Linares, donde solo empató pero dejó muy buena impresión y mereció ganar. Sin embargo, el de ayer en La Línea de la Concepción fue un Efesé desconocido. Completó uno de sus peores partidos del año y por momentos se vio a los jugadores con los brazos caídos. Y eso puede cambiar las cosas.

Si Víctor abandona -de una u otra manera- el banquillo del Cartagena, su sustituto será Eloy Jiménez (Hellín, Albacete, 1971), exjugador profesional en el Hellín, Yeclano, Hospitalet, Levante, Las Palmas, Elche, Córdoba y Castellón. Como entrenador ha dirigido a Hellín, Conquense, La Roda y UCAM Murcia, los tres últimos clubes en Segunda B. Así hablaba de él Pedro Reverte cuando lo contrató para el club de Mendoza en julio de 2014: «Sus equipos siempre se han distinguido por tratar bien el balón. A mí Eloy Jiménez me ha gustado siempre. Le he seguido cuando ha entrenado al Conquense y a La Roda y me gusta su estilo. Sus equipos tratan bien el balón y él es un técnico joven, con muchas ganas e ilusión. Además conoce bien el grupo IV de Segunda B», dijo entonces el lorquino, actual director deportivo del UCAM.

Luego, a pesar de la gran campaña que hizo Eloy Jiménez, de 44 años, con un recién ascendido como el UCAM (segundo en Liga solo por detrás del Cádiz y apeado del ascenso por un Bilbao Athletic que finalmente subió), entrenador y director deportivo acabaron enfrentados y el técnico manchego fue relevado por José María Salmerón, un preparador de máxima confianza para Reverte. Todo empezó cuando Eloy Jiménez quitó del 'once' al lateral Tekio para colocar a Julián Domínguez. Y la cosa empeoró cuando Reverte empezó a renovar futbolistas para la siguiente campaña sin consultar con Jiménez. Al final, esas disputas empañaron una temporada para enmarcar, en la que el UCAM Murcia llegó a encadenar una espectacular racha de 23 partidos sin perder.

«Se ha hecho una gran temporada. El primer objetivo era la permanencia, pero también es verdad que teníamos una plantilla bastante competitiva y el inicio nos dio mucha más confianza para afrontar el tramo final. Estuvimos 23 jornadas sin perder y quizá nos faltó un poquito de gol, ese delantero goleador que marcara un poco las diferencias para poder haber ascendido. Quizá en diciembre tendríamos que haber reforzado el equipo, no se hizo y es lo que nos ha faltado en el 'playoff'», resumió Jiménez al acabar la campaña pasada, lanzando un dardo públicamente a su enemigo Reverte.

Asiduo al palco

Eloy Jiménez, que tiene cierta amistad con Paco Belmonte, Manolo Breis y Deseado Flores, ha visto al Cartagena durante esta temporada en bastantes ocasiones. De hecho, el entrenador manchego se ha dejado ver en algunos partidos por el palco del Cartagonova. Y lógicamente está al corriente de lo que sucede en el club. Nadie le ha llamado, pero la sensación que hay en el entorno del club es que si tiene que coger el equipo tardará muy poco tiempo en decir «sí» a una propuesta de Belmonte.

De Jiménez, un técnico metódico y amante del 4-4-2, dicen que es un tipo afable y campechano. Tanto que cuando no está entrenando trabaja con su padre en una pequeña empresa de construcción que su familia tiene en Hellín. Se doctoró en el Cartagonova, donde logró su primer gran triunfo como entrenador. Fue en marzo de 2013, cuando el modesto equipo manchego le dio un repaso al Efesé de Pacheta, que entonces luchaba por el primer puesto con el Jaén. Ganó el equipo de Eloy Jiménez (1-2, con goles de Jesús García y Sergio Ortiz).

Nunca ha entrenado a un grande y su perfil es bastante diferente al de Víctor, lo que juega a su favor para ser el elegido en el caso de que el todavía entrenador del Cartagena acabe hoy su primera aventura en los banquillos. Solo 27 puntos en 22 jornadas y una racha de 3 de 18 en el último mes y medio son motivos más que suficientes como para pensar en un cambio. Si lo hay, vendrá Eloy Jiménez. Es el único candidato.