Cartagena

Un contrato de arras y veinte días esperando una transferencia que no llega al Cartagena

Así las cosas, el proceso de compraventa del Efesé parecía haberse cerrado el pasado 30 de septiembre, unas horas antes de que Jandro Castro debutara en el banquillo albinegro con aquella sorprendente victoria en El Sardinero (1-2). Aquel día parecía que todo estaba hecho y que la transición para que desembarcara el grupo de Javier Recio, ex director deportivo del Real Murcia, iba a ponerse en marcha de forma inmediata.

De hecho, hace 20 días que se llegó a un acuerdo verbal y se firmó un contrato de arras entre las partes en el despacho profesional de Andrés López Atenza, el abogado murciano que vela por los intereses de Paco Belmonte y Felipe Moreno en esta operación. Ese contrato de arras, un acuerdo privado donde las partes pactaron la reserva de la compraventa de la sociedad, entregándose como prueba una pequeña cantidad de dinero en concepto de señal, existe.

Este acuerdo era el principio del fin de la etapa de Belmonte en el Cartagena, más allá de que los compradores querían contar con quien ha sido presidente del Efesé desde 2015, al menos hasta el 30 de junio de 2025, por aquello de llevar a cabo «una transición ordenada». Tanto Javier Recio como Rafa Cascallana, que sería su mano derecha, entendían que Belmonte y gente de confianza debían continuar en sus puestos durante los próximos meses.

Pero lo cierto es que todo esto será papel mojado si el dinero no llega. Y han pasado 20 días y el dinero no aparece. Esa transferencia con la que debía arrancar el calendario de pagos y hacer que el 85% de acciones de Duino Inversiones (Felipe Moreno) y el 15% de Paco Belmonte pasara a manos del constructor valenciano que iba a traer Javier Recio no termina de llegar, lo que provoca que en la directiva del Cartagena cunda el desánimo. Se da por hecho que el citado promotor inmobiliario se ha echado para atrás y no abonará los 12 millones que iba a pagar por el club. Y se siguen mirando otras alternativas.

Mientras tanto, Felipe Moreno habló ayer por vez primera en público de su aportación al Cartagena desde 2015. «[Belmonte] y yo fuimos socios en hostelería y él fue director deportivo en el Leganés dos años. Me dijo lo del Cartagena y le comenté que tirara para adelante. Es un tema bonito. Estando en el Leganés les cedí a algún jugador y les he ayudado. Cuando se tienen amigos hay que ayudarse. Hace poco estuve en su boda. Tengo una relación muy cordial con él al margen del fútbol. Muchas veces en broma he dicho que es mi tercer hijo. Aquí estoy para lo que haga falta y cuando me lo han pedido y le he podido ayudar, les he ayudado. Tanto económicamente como deportivamente», afirmó el dueño del Real Murcia en una entrevista concedida a Relevo.