Cascallana no tira la toalla y hoy se reúne con Martí y Andrés López
El agente leonés insiste en mantener viva una operación que en el club dan por «caída», ya que llevan casi dos meses esperando el dinero
En el FC Cartagena dan ya por amortizada la negociación con el empresario valenciano Enrique Martí, promotor inmobiliario que cerró el pasado 30 de septiembre un acuerdo verbal con Andrés López Atenza, abogado de Felipe Moreno y Paco Belmonte, para comprar el club albinegro a cambio de 16 millones de euros. Han pasado casi dos meses de aquello y el inversor que vino de la mano del agente leonés Rafa Cascallana no ha puesto ni un solo céntimo encima de la mesa, lo que es una señal inequívoca para Belmonte y su equipo de trabajo de que esta operación está «completamente caída».
Sin embargo, Cascallana, que aparcaría su faceta de representante de futbolistas y entraría en el Efesé como director general, no tira la toalla y sigue preparando su hipotético desembarco en el Cartagena, donde estaría acompañado por Javier Recio como director deportivo y Omar Nicolás como director de cantera. Así, hoy mismo ha organizado una reunión a tres bandas, en principio en Murcia, con López Atenza y con el propio Martí para redifinir la forma de entrada en el club albinegro, aunque desde el grupo de Recio y Cascallana se repite una y otra vez que la demora en cerrar la compraventa no se debe a un problema de liquidez del citado Martí, sino a trabas burocráticas y administrativas.
Como prueba del interés de Martí por hacerse con las riendas del Cartagena cuanto antes, recuerdan que el empresario valenciano viajó a Madrid en varias ocasiones y presentó hace varias semanas toda la documentación exigida por el Consejo Superior de Deportes (CSD) y LaLiga para agilizar la operación. Y tanto Cascallana como Martí insisten en que el dinero llegará y que no es un hándicap relevante que el equipo sea colista y tenga muchas probabilidades de descender a Primera Federación.
El empresario valenciano presentó hace varias semanas en Madrid la documentación exigida por el CSD y LaLiga
Enrique Martí es un empresario poco conocido en Valencia, ciudad en la que tiene fijada su residencia, y no hay constancia de que participe activamente en la vida social, cultural o deportiva de la capital del Turia. Se mueve también por Benidorm y Palma de Mallorca, donde está negociando la compra de un hotel, aunque sus dos empresas más importantes aparecen inscritas en los registros mercantiles de Pontevedra y Madrid.
Desde diciembre de 2017 es administrador único de la sociedad Conservas Gallegas Portonovo SL, que tiene su sede social en el municipio valenciano de Massamagrell, a pesar de que la empresa aparece registrada en la provincia de Pontevedra. En junio de 2019, Martí fundó Executive Privilege SA, cuyo objeto social es la «compraventa, adquisición, tenencia, disfrute y enajenación de valores mobiliarios, y de participaciones sociales o acciones en el capital social de cualquier tipo de sociedades». Con esta sociedad es con la que quiere hacerse con el control del FC Cartagena, pero las semanas van pasando y el dinero nunca llega.
Enrique Martí tiene una tercera empresa, Hispana Internacional de Repuestos SL, con sede en el municipio valenciano de Tavernes Blanques, con la que ha hecho negocios durante los últimos años en el sector maderero en Brasil. Su intención ahora es invertir en un club de fútbol y quiere hacerlo en el Cartagena, pero lo cierto es que las semanas van pasando y en el Efesé crecen las dudas sobre la capacidad económica de Martí para lograr cerrar la operación.
