Murcianos repartidos por Europa y comprometidos con un futuro común
El cambio climático y las políticas de migración son algunos de los temas que preocupan a ciudadanos de la Región que viven fuera: «Hay que votar»
Más de 39.000 ciudadanos de la Región mayores de 18 años viven desperdigados por el mundo. De estos miles de murcianos con derecho a ... voto en las elecciones del próximo domingo, 16.370 están repartidos por los 26 países que -junto a España- componen la Unión Europea (UE), según la última actualización del Cera (Censo Electoral de Residentes Ausentes) publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) con motivo de la inminente cita comunitaria con las urnas.
Actualmente, el estado miembro donde más residentes de la Región ausentes hay es Francia (10.397). País vecino al que le siguen de lejos en el 'ranking' Alemania (3.016), Bélgica (1.021), Italia (417) y Países Bajos (416). En el conjunto europeo, no existe ningún territorio donde no viva un murciano, a pesar de que el INE no contabiliza oficialmente a ninguno en Letonia. Sin embargo, cabe destacar que el diplomático Manuel Alhama, natural de la Región y colaborador habitual de LA VERDAD, es el embajador de España en el país báltico.
María Rubio es una de esas murcianas que ha echado raíces en Europa. A sus 43 años, hace ya más de una década que esta licenciada en Comunicación Audiovisual se afincó en Alemania. «Mi marido fue seleccionado entre más de 5.000 aspirantes para trabajar como ingeniero en Volkswagen y pensamos que era una oportunidad que no podíamos dejar escapar», cuenta sobre la razón que hizo que pusiera tierra de por medio de su Murcia natal. Echando la vista atrás, reconoce que lo más duro de su llegada al país germano fue aprender el idioma, a pesar de que actualmente se desenvuelve a la perfección y trabaja como profesora de español en la escuela 'Dr. Buhmann Schule' de Hanóver.
Sentimiento europeo
Respecto a su percepción comunitaria, María asegura que se identifica con la UE. «Aunque no estoy de acuerdo con muchas políticas económicas y territoriales, ser europea es positivo para mi vida lejos de España, ya que existe una educación pública obligatoria y de calidad y el acceso a la sanidad es universal». Añade que «es una suerte no tener problemas con el visado para trabajar, compartir moneda y poder viajar libremente por todos los países miembros y que en cualquier embajada de un estado de la UE te traten como ciudadana, aunque no seas de allí».
Hay un total de 16.370 murcianos con derecho a voto en las elecciones de mañana repartidos por todos los países de Europa
También valora «la diversidad cultural y la promoción del plurilingüismo», pero, sin duda, de lo que más orgullosa se siente como ciudadana europea es de la labor humanitaria. «Me gustó mucho que la Unión Europea acogiera en el año 2015 a los refugiados sirios y cómo se ha recibido también a los de Ucrania».
Sobre los retos que, en su opinión, debe abordar la UE resalta «algo que preocupa mucho a las nuevas generaciones, como el cambio climático y la reducción de las emisiones». En este sentido, cree que se debe «promover la reutilización y el reciclaje de materiales para minimizar los residuos». Reducir las «disparidades económicas entre regiones» y regular la inteligencia artificial son otras de las cuestiones que considera prioritarias en el entorno global. «Hay que desarrollar un marco ético, además de fortalecer la protección de datos personales y de la privacidad».
Aunque reconoce que echa mucho de menos a su familia -especialmente a sus sobrinos Pablo, Álvaro, Gonzalo y Mateo-, de momento no se plantea volver a la Región de Murcia. «Una vez que aprendes el idioma y te integras, Alemania es un buen país para desarrollarte laboral y personalmente», destaca.
El plus de la libre circulación
Desde Lisboa, Amparo Oliver (Santomera, 1981) también afirma que se considera ciudadana europea. «Muchos proyectos llegan financiados por la UE, aunque no tengamos consciencia de ello». En lo personal, asegura que cuando viaja a algunos de los 27 estados miembros siente como algo positivo la libre circulación entre países. En el plano laboral, esa percepción se ve potenciada porque trabaja en una institución europea, la Agencia Europea sobre Drogas, donde es coordinadora de medio ambiente. «Estoy familiarizada con las dinámicas y me beneficio de las oportunidades que seguramente no tendría en otro tipo de trabajo», resalta esta ingeniera técnica agrícola y licenciada en Ciencias Ambientales que lleva viviendo en Lisboa desde el año 2015.
Francia es el Estado miembro donde más ciudadanos de la Región residen, seguida de Alemania y Bélgica
Políticas ambientales
Amparo coincide con María en la urgencia de abordar de forma global la lucha contra el cambio climático «y que se cumplan las políticas ambientales que ya deberían estar implementadas hace años». Además, echa en falta «mejoras en las condiciones laborales y sociales, así como políticas feministas y de igualdad» con el objetivo de «garantizar las mejores condiciones de vida posibles, tanto en el presente como con vistas al futuro».
Sobre la cita con las urnas de mañana, señala que, «en general, hay una imagen de que las elecciones al Parlamento Europeo no son importantes y que no nos afectan los resultados, pero me parece todo lo contrario y, por supuesto, hay que votar». Derecho que ella ya ejerció el pasado fin de semana en el Consulado de España en Lisboa.
Al preguntarle por la imagen que tienen los portugueses de España, destaca que «hablan y entienden el castellano mejor que nosotros su idioma» y añade que, según su experiencia, «Murcia es la gran desconocida. De mi círculo de amistades, casi nadie la conocía hasta que llegué yo». Aunque no contempla volver a corto plazo, Amparo no olvida sus raíces y echa mucho de menos la gastronomía de la Región, «sobre todo las tapas, los pasteles de carne, las empanadillas y las alcachofas, que aquí casi no se consumen». Aunque, de lejos, lo que más extraña es pasar más tiempo con su gente y sus dos sobrinas. «No poder estar cerca de ellas es lo que peor llevo de vivir fuera», resalta la santomerana, que nació un 25 de abril, fiesta nacional en Portugal en la que se conmemora la histórica Revolución de los Claveles que puso fin a la dictadura lusa. «Me emociona mucho esta coincidencia».
De Aljucer al corazón de la UE
Javier Sánchez también ha encontrado en el corazón de la UE una oportunidad para desarrollarse. Desde hace seis años, este vecino de la pedanía murciana de Aljucer, que se declara «profundamente europeo», trabaja en Bruselas como analista de sistemas en una consultora privada.
Sobre los comicios del 9-J, asegura que «es fundamental votar por la importancia que tiene el Parlamento Europeo en nuestro sistema democrático». Y, en esta línea, señala que «existe una ola euroescéptica y de extrema derecha preocupante, y no podemos permitir que estos movimientos supongan una regresión en los derechos fundamentales». Señala como temas prioritarios «la geopolítica exterior, alinear la fiscalidad entre países, mejorar las oportunidades de empleo, la política ecológica y una mayor coordinación de la seguridad y la defensa, así como abordar la inmigración europea».
Y, aunque se muestra encantado de la diversidad cultural y las oportunidades laborales que le ofrece Bruselas, no duda en afirmar que algún día volverá a la Región para estar cerca de «familia, amigos, el sol y nuestra gastronomía». Junto a María y Amparo, el suyo es un ejemplo de murcianos comprometidos con el futuro de la Unión Europea.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión