La calidad del empleo regional sigue a la cola, pese a su notable mejora
La estabilidad laboral, el tipo de jornada y la ocupación son algunos de los indicadores medidos en el estudio
EP
Murcia
Miércoles, 15 de noviembre 2023, 00:00
La calidad del empleo en la Región de Murcia ha mejorado 3,7 puntos en 2022 respecto a 2007, aunque el índice se sitúa en 99,9, el tercero más bajo por comunidades junto a Andalucía. Solo es superior a los de Canarias y Extremadura (ambas con 98,8). El índice 100 se corresponde con el que tenía la media de España en 2007.
Así se recoge en el último estudio elaborado por la Fundación Ramón Areces y el Ivie titulado 'La calidad del empleo en España y sus comunidades autónomas' y que refleja que todas las comunidades autónomas, excepto Extremadura, han mejorado en el índice de calidad del empleo respecto al año 2007. La estabilidad laboral, el tipo de jornada y de ocupación, la conciliación, los salarios percibidos o la siniestralidad son algunos de los 18 indicadores de calidad analizados en este índice, que en 2022 se sitúa 3,1 puntos por encima del de 2007.
El informe, elaborado por Lorenzo Serrano y Ángel Soler, investigadores del Ivie y profesores de la Universidad de Valencia, junto con el economista Fernando Pascual, ofrece este indicador para el conjunto de España y también por comunidades autónomas.
La temporalidad es uno de los problemas que permanecen, aunque se haya reducido en los últimos años
Los mayores incrementos en calidad del empleo se han producido en Cataluña, Murcia y Castilla-La Mancha (más de 3,5 puntos) y los más débiles se han registrado en Canarias, Cantabria y Aragón (en torno a 2 puntos).
En términos de calidad global del empleo, los mayores niveles se encuentran en País Vasco, Madrid, Cataluña, Navarra y La Rioja, todas autonomías con índices por encima de la media nacional. Por el contrario, la situación menos favorable se muestra en Extremadura, Canarias, Andalucía y Murcia.
El estudio explica que, en general, la mayoría de comunidades muestran avances en cada una de las cinco dimensiones consideradas, lo que refleja una evolución positiva de la calidad del empleo desde 2007. Sin embargo, eso no significa que no existan problemas relevantes, incluso algunos agravados, así como importantes diferencias entre las regiones. Así, la temporalidad sigue siendo muy alta, del 17,3% en España.
