Un gran ElPozo Murcia se impone al líder y fuerza el desempate

El duelo empezó con el homenaje al capitán Felipe Valerio, que se enfrentaba al que podía ser su último partido con la camiseta de ElPozo Murcia. Cuatro minutos tardó en devolver la ovación cerrada del respetable que le ha acogido durante los últimos siete años, con un derechazo inapelable al palo largo para adelantar a los murcianos (1-0). Beso al escudo y dedicatoria a la grada, en dirección a su mujer e hijas, con las que apenas cinco minutos antes se había emocionado en el centro de la pista.

Pero en la respuesta, una rápida combinación entre Cristian y Pani, que finalizaba con un punterazo abajo, igualó el duelo ante la mirada de un inerme Juanjo (1-1), que apenas unos segundos más tarde evitó la remontada de Peñíscola con una reacción felina. El gol no afectó a los de Josan, intensos y pegajosos en la presión adelantada, donde provocaban las imprecisiones de los azulones. Tras un robo, Álvarez disfrutó de un mano a mano contra Gus, pero el intento de vaselina se marchó por encima del larguero.

ElPozo robaba y disfrutaba de ocasiones con espacios, pero no terminaba de herir a un Peñíscola falto de su habitual precisión. Yeray la sacó bajo palos cuando el Palacio ya cantaba el doblete de Valerio, y Gadeia cortó abajo el pase de la muerte con el que Juanico se relamía.

Con 15 minutos cumplidos, Felipe Valerio dejaba sentado a su par con una pisadita deliciosa, la zaga de Peñíscola sacaba el centro del capitán pero Ricardinho cazó el rechace para adelantar de nuevo a ElPozo con un pase a la red (2-1). Tras el gol, Yeray cometió la quinta falta de los azulones, con cuatro minutos todavía para el descanso y la sensación de que ElPozo podía hacer daño.

El bonus devino en el doble penalti que Gus sacó a Gadeia pero, en la acción posterior, el propio cierre forzaba la pérdida de Cristian, que Marcel aprovechó con un zurdazo arriba para poner el 3-1, como un zarpazo a la línea de flotación de un Peñíscola obcecado con la actuación arbitral. El primer tiempo murió con un contragolpe de Ricardo Mayor, que pudo poner el cuarto como guinda a un gran primer tiempo de ElPozo Murcia, claramente superior al líder Peñíscola.

La reanudación despegó con una doble ocasión de Marcel, que asistió a la cita enchufado, eléctrico, con un punto de esa finura que le valió el MVP el año pasado y que esta campaña, con la irregularidad de las lesiones, no se ha podido ver. Tras una gran combinación, Bruno Días puso el 4-1 en sus primeros minutos en la serie, con un violento derechazo que superaba al guardameta Gio, recién entrado por el lesionado Gus.

El partido parecía sentenciado, con el marcador como fiel reflejo del dominio mostrado por ElPozo, pero en el ecuador de la segunda parte Sancho la cazaba dentro del área y recortaba distancias (4-2). A falta de siete minutos para el final, sin apenas ángulo, el latigazo seco de Felipe Valerio volvía a poner tres goles de distancia (5-2). Su rotación como premio y todo el Palacio se une a la Marea Roja, que corea el nombre del capitán.

En los compases finales, con el partido decidido salvo desastre, el juego de cinco de Peñíscola se topó una y otra vez contra el muro de los de Josan, que aprovecharon una pérdida para marcar el sexto a portería vacía, obra de Marcel. El duelo acabó con uno de esos goles, obra de Pani, que nadie celebra (6-3). Golpe encima de la mesa de ElPozo Murcia, que si el jueves demostró que podía competir de tú a tú con el líder de la fase regular, este domingo se ha impuesto con claridad.