Motegi, primera bola de partido para un Marc Márquez voraz
El de Cervera busca este fin de semana el 7º título de campeón del mundo de MotoGP en una cita donde regresan al asfalto los cuatro murcianos
El Campeonato del Mundo de motociclismo empieza a llegar a su fin y el mejor piloto de la temporada quiere ponerle el broche de oro este mismo fin de semana a un año excelso. Marc Márquez busca en el Gran Premio de Japón su séptimo título de campeón de MotoGP, esa corona que perdió hace unos años y anhela recuperar tras varias campañas con demasiadas heridas de guerra y muy pocas sonrisas. Esas que no ha dejado de relucir esta temporada vestido de rojo Ducati, donde ha encontrado la felicidad que tanto buscaba.
El de Cervera necesita tres puntos más que los que consiga su hermano Álex Márquez para volver a ganar un título cinco años después. Solo podría ser campeón en el circuito de Motegi el domingo, ya que no le valdrían los resultados de la sprint del sábado. Parece la plaza idónea, ya que el catalán ha logrado tres de sus seis títulos mundiales en el GP de Japón, pero nunca lo consiguió con cinco carreras de margen, algo que lo haría doblemente especial. «El valor de un título es el mismo, pero diría que en 2013 conseguí el más importante por ser el primero. Este será el título que habré logrado después de atravesar los momentos personales más difíciles y lo considero el principal reto de mi carrera», confesó ayer Márquez.
En el país del sol naciente regresan también al asfalto los cuatro pilotos murcianos: Pedro Acosta, Fermín Aldeguer, Máximo Quiles y Álvaro Carpe. Los dos primeros vuelven al ruedo en la máxima categoría con el reto de cerrar la temporada con los mejores resultados posibles y escalar algún que otro puesto en la clasificación.
El Tiburón de Mazarrón aterriza en Japón tras el mal trago del Gran Premio de San Marino, en el que tuvo que abandonar tras romperse la cadena de su KTM, esa que parecía devolverle la sonrisa en las últimas semanas tras un inicio de campaña más que negativo. Acosta estaba creciendo hasta entonces, por lo que perseguirá desde los primeros entrenamientos libres de hoy recuperar esas buenas sensaciones que ganó tras las vacaciones de verano. Por su parte, Fermín Aldeguer tiene entre ceja y ceja ser el mejor debutante del año al final del campeonato, algo que tiene en la palma de su mano. Pero para ello deberá ser más regular en las seis carreras que quedan por delante. Tras el segundo puesto del Gran Premio de Austria, el murciano ha sufrido en todas las grandes citas y debe volver acercarse al podio para sellar el objetivo que se marcó en un primer año que ya de por sí es notable.
El que tiene ante sí otra oportunidad de oro de hacer algo fuera de lo normal es Máximo Quiles. El jovencísimo piloto murciano es tercero en la tabla con cuatro carreras menos que el resto de los pilotos que compiten en Moto3. Ha sido, en su primer año en el Mundial, uno de los corredores más regulares de la temporada, con cinco segundos puestos y dos victorias de prestigio. Solo 29 puntos le separan del segundo clasificado, el valenciano Ángel Piqueras, a falta de seis carreras, y no hay mayor reto para el piloto del Aspar Team que acabar en esa segunda posición siendo 'rookie'.
Álvaro Carpe, que ha firmado un Mundial irregular hasta la fecha, busca cerrarlo con buen sabor de boca, ese con el que arrancó en Tailandia al quedar segundo. El de El Esparragal desea subir al podio antes del fin de fiesta.