Katir: «Sabía que algún día lo conseguiría»
El muleño, que este viernes será homenajeado por sus vecinos tras su bronce en el Mundial, confiaba en sus opciones «por las marcas que había hecho»
Tras 23 horas de viaje, una parte de la expedición española del Mundial de atletismo aterrizaba a primera hora de la mañana de este jueves en la terminal 4 del madrileño aeropuerto de Barajas. El avión iba lleno de gente, pero dos personas de las que iban dentro de él eran especialmente felices en su vuelta a casa: el muleño Mohamed Katir y el navarro Asier Martínez, los dos bronces españoles en el Mundial de Eugene (Oregón), el primero en el 1.500 y el segundo en el 110 vallas.
Katir, que regresó solo ya que su técnico Gabi Lorente sigue en Eugene acompañando a Mariano García, no se lo termina de creer. «Sabía que algún día iba a conseguir esta medalla porque había hecho grandes marcas en el 1.500, en el 3.000 y en el 5.000. Yo he entrenado mucho para esto y el objetivo era llegar muy bien a este campeonato. El reto era conseguir alguna medalla este año y aparcar un poco el tema de los récords. Sabía que algún día iba a conseguirlo, pero no sabía que sería en este Mundial», comentó el muleño, de 24 años.
El atleta de Mula está «muy feliz» y ya piensa en sus próximas citas. «No me pongo mucha presión para el Europeo [que se celebra el mes que viene en Múnich], para mí lo más importante es disfrutar y luchar. Yo quiero irme de las carreras sabiendo que lo he dado todo. Cuando estoy en una competición tengo que dar el 100% salga bien o salga mal, pero la cuestión es darlo todo», aseguró el atleta afincado en Mula, «destrozado» tras el agotador viaje en avión de casi 24 horas.
El dato
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23 años llevaba el atletismo español sin conseguir una medalla en la prueba de 1.500 metros en un Mundial de atletismo al aire libre.
«Ni siquiera he dado vueltas a la cabeza sobre el logro, pero esta medalla de bronce sabe a gloria, creo yo, a emoción y felicidad, y espero mantener esta mentalidad y mejorarla el año que viene, o en los Juegos de París de 2024» añadió Katir.
Hoy será recibido por sus vecinos, a las 13.00 horas, en el Ayuntamiento de Mula. «Ha sido muy emocionante ver a nuestro país volcarse con el atletismo, cómo nos están motivando y animando desde casa, por eso siempre salimos a dar el 100%», comentó un Katir que en unos días comenzará a preparar el Europeo que arranca en Múnich el 15 de agosto, donde posiblemente doble prueba y busque el más difícil todavía: lograr medalla en los 1.5000 y en el 5.000.
«Hace poco más de un año miraba a Jakob [Ingebrigtsen, el noruego que se proclamó campeón olímpico en el 1.500 en Tokio y que el pasado miércoles tuvo que conformarse con la plata en Eugene] y no me veía en su misma dimensión. Ahora no es así. Es un rival. Muy bueno, por supuesto. Pero sé que puedo luchar con él en cualquier prueba. Y contra todos los demás», afirma Katir cuando se pone a analizar cómo ha cambiado su vida en los últimos dos años.
La ilusión de Mariano
Mientras, el Mundial sigue. Y la jornada de este jueves de los españoles se saldó con la eliminación de Sara Gallego en la semifinal de los 400 metros vallas y la clasificación del fuentealamero Mariano García y Álvaro de Arriba para esa ronda en 800 metros, donde no estará el tercer integrante del equipo, el gallego Adrián Ben.
La armada del 800, que buscaba emular al 1.500, perdió a uno de sus integrantes. Mientras Alvaro de Arriba y Mariano García avanzaron con solvencia a semifinales, Adrián Ben, quinto clasificado en los Juegos y sexto en Doha'19, quedó eliminado. «Las sensaciones han sido espectaculares», dijo en la zona mixta el corredor de Cuevas de Reyllo, quien dominó su serie en todo momento (1:45.74). El campeón del mundo en pista cubierta tomó la cabeza en su serie y reguló bien para no pasar apuros al final. Cruzó la meta en tercer lugar.
«Llegamos en buen estado de forma y esperemos ir pasando las pruebas que quedan hasta (la final de) el sábado», afirmó un Mariano García que en la pasada madrugada buscaba clasificarse para la final del 800.