Jorge Almansa engorda su vitrina

«No me puedo quejar, desde luego. Ha sido una temporada de mejor imposible», dice el cartagenero, sincero, natural, extrovertido, antes de iniciar unas merecidas vacaciones en su tierra. Esta temporada Almansa decidió dar un giro de 180 grados a su carrera deportiva, inquieto y en busca de nuevos estímulos. El receptor y opuesto internacional con España concluyó una gloriosa etapa de diez años (en varias etapas, tras un paso por Rumanía) en el Unicaja Almería. Es uno de los clubes más laureados del voleibol nacional. Allí era el capitán general y ganador de hasta ocho títulos: tres Ligas, dos Supercopas y tres Copas del Rey.

Tocó techo Almansa en Almería, donde vive felizmente con su pareja e hija pequeña. Y el verano pasado, inconformista, decidió embarcar una nueva aventura con el Guaguas. El club canario fue siempre uno de los equipos hegemónicos de este deporte, durante las décadas de los 80 y los 90. Aquella directiva volvió en 2020, con fuerza para recuperar el trono perdido en el siglo XXI, y armó un equipo titánico. «En Almería he pasado prácticamente toda mi vida, tengo mi casa, la familia de mi pareja. Pero no me gusta la comodidad y no me convencían las ofertas en el extranjero, por la inestabilidad que supone la crisis sanitaria. En el Guaguas he encontrado un proyecto ganador, estímulos diferentes, ilusión y un sueldo medio para lo que es el voleibol», cuenta.

Fruto de todo ello ha conseguido otros dos títulos, en el primero de los dos años firmados en el Guaguas. El último en caer, hace tan solo unos días, fue el liguero. Almansa lo consiguió en el tercer y último partido de la final. Fue en Almería, precisamente ante su exequipo: 1-3 ((26-24, 19-25, 19-25 y 20-25). El cartagenero es uno más dentro de una plantilla llena de grandes jugadores, como el estadounidense Knigge. El club va muy en serio y ha completado el doblete con más de 700.000 euros de presupuesto.

El Guaguas Las Palmas no ganaba la Superliga desde 1994. Recuperada la hegemonía por todo lo alto, Almansa tiene ahora dos meses de vacaciones y no piensa ni mucho menos en la retirada. «Tiene gasolina para rato», dicen en su club. Su próximo reto empieza en septiembre, con la disputa de la fase previa de la Champions. Ese título europeo es el que falta en la vitrina del cartagenero.

Para ese reto le acompañará en el Guaguas el central cartagenero Borja Ruiz, quien este año concluyó una etapa en el Nantes francés. Ambos ya brillaron juntos en Almería. El 'trío de Cartagena' lo completaba entonces Chema Castellano, pero dejó a un lado el profesionalismo para preparase las oposiciones de Policía Nacional.

La realidad del voleibol es la que es. Almansa, reivindicativo, lo sabe y en 2018 no dudó en renunciar al Preeuropeo con la selección española. Ahora también le tocará renunciar, para quedarse a cargo de su hija. «Lo primero es lo primero», dice. El cartagenero (mide 1,98), natural de la Nueva Cartagena, jugó al fútbol en el Cartagena FC y desde antes de los 15 se pasó al voleibol, en el CV Mediterráneo. Se fue de la ciudad siendo adolescente. Es un fiel seguidor (y sufridor) del Efesé y del Jimbee. Estudia Trabajo Social en la UNED.