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Marcelo Bielsa da instrucciones. Archivo
El Leeds de Bielsa empata en el derbi de Yorkshire

El Leeds de Bielsa empata en el derbi de Yorkshire

Unos hinchas han puesto letra a la 'Bohemian Rhapsody' de Queen, expresando la convulsión emocional provocada por el argentino

Iñigo Gurruchaga

Corresponsal en Londres (Reino Unido)

Sábado, 29 de septiembre 2018, 00:50

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Marcelo Bielsa tiene una canción y su equipo un ritmo. La cadencia del Leeds United se impone a sus rivales. Al Sheffield Wednesday lo confundió en su casa, en la noche de un viernes. Salían con la pelota y la perdían, cuando muy lejos en el centro de campo. Y entonces 'Los Blancos' componían su melodía, con el polaco Klich, descartado como un inútil por entrenadores anteriores, de director de la orquesta.

Klich a Phillips, Phillips a Cooper o Jansson. Bielsa, que ha dirigido escuadras argentinas que tenían de central a Roberto Ayala, se sienta en un cubo de plástico consumido en su locura por el fútbol siguiendo los devaneos con el balón de estos gigantes tan torpes. De ellos si hay suerte a Klich o a Sáiz, del Real Madrid B, del Atlético de Madrid B, del Huesca. O a los laterales, competentes, Ayling o Douglas.

Llegaba este viernes el balón arriba, cuando llegaba, y casi nunca pasaba nada. A Harrison, el joven cedido por Guardiola para que el maestro Bielsa le cure la precipitación, al delantero Roberts que quizás será bueno mañana, al extremo izquierdo Alioski, con corte de pelo de gran figura y campeón en soberbia. Perdió a su marcador en un contraataque y aquello fue hasta ese momento la señal de vida del Wednesday.

Las lesiones han robado al Leeds United sus dos principales nueves, Roofe y Bamford, y le cuesta meter goles. Perdió por primera vez en el Championship contra el Birmingham, en casa, el pasado sábado. Y en Sheffield un gol de gloria y de churro- el zurdo Reach le dio desde muy lejos a un balón que botaba y voló hacia arriba y luego hacia abajo hasta pegar en la escuadra y adentro- que dejó a los 'whites' con 1-0 en el descanso.

Persigue a los genios la desconfianza de los vulgares, que necesitan la confirmación de que todos son como ellos. ¿Caería de nuevo Bielsa y su segunda derrota desataría el misterio? Bielsa, un pufo, esa es una buena historia. Pero la segunda parte fue como la anterior. El Leeds United con futbolistas de granel dominó de principio a fin al Wednesday. Klich marcó un buen gol, esa fue la diferencia con la primera mitad (1-1).

Tras este empate, el Leeds puede perder el liderazgo este fin de semana. Y su fútbol es aún una suma de fragmentos, de armonías y de disonancias. Quizás por eso, unos hinchas del Leeds han compuesto y grabado un coro de rapsodia. La 'Bohemian' del grupo Queen, un grupo musical que combinaba afanes de la ópera y del heavy metal. «Abre tus ojos, mira a los cielos, somos Leeds», comienza la copla.

Y luego dice entre sus estrofas: «¡Oh Marcelo! ¡Oh Marcelo! Bielsa ha llegado, y este diablo ha creado un equipo para el Leeds, para el Leeds, para el Leeds. ¿O sea que tú crees que puedes venir aquí y cambiar mi vida? ¿O sea que tú crees que puedo amarte más que a mi mujer? Bielsa, escucha Bielsa. Tienes que sacarnos, tienes que sacarnos de esta liga inmediatamente».

El déspota húngaro Orban ha construido en su pueblo, Felcsút, un estadio majestuoso para un equipo mediocre. El grotesco líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, no televisa partidos de la selección nacional desde que vio el 7-0 contra Portugal en el Campeonato del Mundo de Sudáfrica. El empate del Leeds United en el derbi de la región de Yorkshire es un episodio más de la auténtica redención que ofrece la tragicomedia del fútbol. Y aún queda mucho tiempo para su desenlace.

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