De Murcia a Cuba pasando por Bujalance
José Carlos Nievas, reconocido por su faceta como fotógrafo de grupos de música, es seleccionado para la XIV Bienal de La Habana por un trabajo sobre la despoblación de conventos
A principios de abril, José Carlos Nievas (Córdoba, 1966) viajará a la isla mayor de las Antillas para participar en la XIV Bienal de La ... Habana. Tiene previsto exponer dos piezas e impartir un curso de fotografía creativa, desde el pictorialismo hasta los formatos digitales, en el Museo de Arte Contemporáneo de Pinar del Río. Como fotógrafo musical han posado ante su objetivo grupos murcianos como Alexanderplatz, Crudo Pimento, Yellow Melodies o Parade. No se cansa de decirlo: «Murcia está a un nivel brutal. Esto es un paraíso para los que nos gusta la música». El fotógrafo y videoartista cordobés, afincado en la Región, confirma a LA VERDAD que también en abril («¡será un mes tenso!») expondrá en el Museo de la Sangre de Murcia una selección de sus mejores retratos a músicos murcianos.
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Cosas que lleva a La Habana se podrán ver también en Murcia. En el Museo de Pinar del Río, por ejemplo, mostrará un trabajo que ya presentó en su última exposición en Madrid, en la galería Modus Operandi: «Hice una pieza que es una caja de cartón de discos de música electrónica de la que tirabas y, en lugar del disco, salía una foto con retratos de músicos. Para verlo hay que interactuar, sacar, buscar... quería llevar ese juego a mi terreno, sobre todo de interés para los que les gusta la música».
'Sé que estás ahí' es otra pieza de vídeo del artista visual –se puede ver en el perfil de Instagram de @lafarmaciatelurica2–, dentro del proyecto global 'Farmacia'. «Son performances ilustradas con imágenes. Mi proyecto lo grabé en mi pueblo, Bujalance (Córdoba), en un convento donde ha estado muchos años mi hermana mayor, que es monja carmelita descalza, y que en 2021 fue abandonado. Me permitió reconectar con mis recuerdos de ese sitio». Bujalance, pueblo con castillo, que fue árabe, aunque su nombre es de origen romano, pertenece a la campiña del Alto Guadalquivir, muy cerca de Montoro y de Baena. «Desde el Vaticano llevan unos años dictando nuevas normas y para mantener un convento abierto tienes que reunir ciertos requisitos (número de monjas, edades...). A no ser que estés en contacto con alguna comunidad, lo cierto que es muchos no saben que los conventos se están quedando absolutamente despoblados. Están concentrándose, yéndose a grandes ciudades, y es común a todas las órdenes. El edificio que yo retraté lo han donado al Obispado, y parece que lo va a habitar otra orden de vida activa, no contemplativa, y está por ver».
«Reconecté con mi pasado volviendo a mi pueblo, al convento donde ha estado mi hermana, carmelita descalza»
Este registro de José Carlos Nievas «es peculiar», afirma. «Siempre he trabajado por encargo y mi obra personal es diversa, con distintas líneas. Una de ellas es el videoarte. En este caso he documentado una performance, puse trípode y cámara y rodé el paseo. Lo cierto es que sí, he hecho mucho videoarte. Tengo un perfil en YouTube con cosas. De hecho, tengo una cosa que funcionó muy bien, que fue una serie de retratos del panorama de creadores de Córdoba, y fue un asalto a las redes. Un día aparecieron siete perfiles de fotos azules con los ojos cerrados de mucha gente, desde bailaores a artistas plásticos y músicos, y a los quince días todos con los ojos abiertos. Eso ya era un vídeo». En Cuba tiene intención de aprovechar, junto con otro de los artistas participantes, Ricardo Sánchez Cuerda, «fotógrafo muy conocido», para ver al compositor Leo Brouwer, «con el que he trabajado mucho, y me apetece hacerle un retrato para una nueva serie que estoy preparando».
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Esta oportunidad de viajar por primera vez a Cuba la toma como «algo maravilloso», porque los cubanos, señala Nievas, «tienen una forma de entender el arte como algo que construye, que es sanador, y siempre creando vínculos. Es genial». Además de la pieza que expone en el Museo de Pinar del Río, en el exterior de este espacio proyectará por la noche 'Negro sangre', retratos con fondo negro.
«Ser seleccionado para esta Bienal de La Habana es un subidón», afirma. «Porque conecto con esa forma de ver el arte como algo esencial». Nievas está feliz de vivir en Murcia, «una ciudad que está en la vanguardia musical del país. Se habla de Madrid, Barcelona, Granada y Murcia, y a veces Murcia está por delante de Barcelona, que es más underground. Gente estupenda, ¡y no hay competitividad insana!».
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