El UCAM asalta el feudo grana

El UCAM asaltó la casa del Real Murcia. El equipo de Salmerón se llevó los tres puntos de la Nueva Condomina y ha puesto patas arriba la lucha por el primer puesto. El conjunto universitario no se volvió loco y tuvo la paciencia suficiente para encontrar una grieta por la que entrar y destrozar al Murcia. El equipo grana fue superior en la primera parte y en muchos minutos de la segunda, creó las mejores ocasiones del partido, pero no fue letal en ninguna de las dos áreas, donde brillaron Biel Ribas y Pallarés, que acertaron en las dos jugadas clave: el único gol del choque y el mano a mano que el portero universitario le sacó a Isi. El UCAM ha dinamitado la autoestima del Murcia, que ya no tiene red y que no se puede permitir ningún fallo si quiere acabar líder la Liga.

Aún no se pueden evaluar qué daños colaterales dejará la derrota en el derbi en un Real Murcia en el que las alarmas ya están encendidas y que ha perdido su fiabilidad en casa, donde solo ha conseguido un punto de los últimos nueve y en donde ha caído frente al Cádiz, el Sevilla Atlético y el UCAM, los otros tres equipos que tienen billete para el 'playoff' en el grupo IV. En lo anímico la victoria es un espaldarazo para el UCAM, que consiguió sobreponerse a la presión de un ambiente hostil y madurar el encuentro hasta asestar un golpe definitivo a su rival en la capital de la Región. Además, con el 0-1, el equipo presidido por Mendoza manejó el choque a su antojo y llevó a los granas a una guerra de guerrillas que desquició al líder y lo alejó del fútbol.

Ambiente de Segunda

El partido entre el Murcia y el UCAM tuvo más picante que fútbol. El equipo grana jugó a ráfagas, coincidiendo con las apariciones de Chavero. Al principio, ninguno de los dos equipos quiso pegarse un tiro en el pie ni arriesgar más de la cuenta. Aira apostó por la defensa titular que quiere para el 'playoff', con José Ruiz, Ruso, Sobregrau y Pumar. Además apostó por Fran Moreno, pese a que tuvo que jugar con máscara. Salmerón, por su parte, apostó de partida por intentar dominar el choque y metió a Nono Delgado por delante de la pareja de pivotes formada por Checa y César Remón. Traducción: el entrenador del Murcia no se tomó el choque contra el UCAM como uno más y el técnico universitario, a pesar de que necesitaba ganar para acercarse al líder, apostó por el mismo esquema que le ha mantenido toda la Liga en lo más alto de la clasificación y no se volvió loco.

En los primeros minutos el Murcia se fue sintiendo más cómodo aunque fuera el UCAM el que saliese más revolucionado. Pallarés tuvo la primera ocasión del choque con un remate de espaldas pero José Ruiz y Sergio García contestaron con disparos lejanos. Los dos equipos estuvieron encorsetados por la importancia de los puntos pero los granas se acercaron más al gol. A los veintitrés minutos llegó la primera gran ocasión del choque con un centro desde la banda de Carlos Álvarez y un remate de Chavero de cabeza que se fue alto. Las pérdidas en el centro del campo del UCAM propiciaron buenos contragolpes del Murcia, aunque el equipo de Aira no llegaba con claridad.

Aun así, Fran Moreno apareció por la banda izquierda y puso un par de centros a Carlos Álvarez, que no llegó a uno de ellos, en boca de gol, por centímetros. El Murcia pegaba latigazos pero no fue un equipo efectivo. El que mejor leyó el partido en el UCAM fue Nono González, que arrancó con velocidad en dos ocasiones tras robar el balón y puso a tiritar a la Nueva Condomina. Eso sí, la primera parte concluyó con la sensación de que el Murcia había sido mejor, sensación acrecentada tras la última ocasión fallada por Carlos Álvarez y parada por Ribas.

Pero todas las sensaciones buenas para el Murcia de los primeros cuarenta y cinco minutos fueron desapareciendo paulatinamente en el segundo acto. El UCAM mostró las garras en los primeros minutos de la segunda parte con un buen arranque, con Nono González buscando la meta de Fernando. Góngora, el más silbado por la afición grana tras un roce con una aficionada grana en Twitter, disparó con peligro y potencia un misil que pasó cerca del larguero. El equipo de Salmerón, aunque le costaba salir con el balón jugado, se soltó la melena. Iván Aguilar buscó con un centro la cabeza de Pallarés y dos minutos después Nono González probó a Fernando con un disparo potente.

Partida de ajedrez

Los dos técnicos movieron sus piezas. Salmerón metió a Isi Ros y Josan; Aira metió a Azkorra y a Rafa de Vicente. La salida de Sergio García y la entrada del jugador cedido por el Málaga no le sentó bien al Murcia. Sobre todo porque el leonés mandó a Chavero a la banda y el barcelonés dejó de tener incidencia en el juego y en el partido. Hasta que llegó la jugada que cambió el choque. Josan se probó con un disparo que Fernando despejó a su derecha y en la jugada posterior Góngora puso un centro medido a Pallarés que el valenciano introdujo en la red. Acierto total: una gran ocasión y un gol.

En el tramo final el UCAM, que demostró que está capacitado para jugar partidos de alta tensión, desquició al Murcia. Aira metió a Isi en el campo y el ciezano tuvo el empate en un mano a mano con Biel Ribas en el último minuto, tras una jugada personal de Carlos Álvarez que el portero universitario atajó en una acción cargada de reflejos. Con la victoria, ante más de 18.000 espectadores, el UCAM ha dinamitado la lucha por el liderato que quedará en manos de uno de los dos equipos murcianos tras el empate entre el Cádiz y el Sevilla, y se posiciona como otro claro candidato al ascenso junto a los granas.